Hace tiempo, desde que le dieron la posibilidad de ser titular, Nahuel Herrera es uno de los jugadores con rendimiento más parejo en Peñarol. El zaguero central de 20 años juega como si tuviera ocho más, y con una solvencia admirable gana la mayoría de los duelos directos a los que se expone; un claro ejemplo fue su actuación en el 0-0 con Vélez.

El joven carbonero habló una vez finalizado el juego en el Campeón del Siglo. En primer lugar se le consultó por el resultado, que dejó a Peñarol segundo en su serie y a la expectativa de cruzarse en octavos de final con uno de los que finalizaron en primer lugar. “El objetivo era terminar primero, el objetivo era ganar hoy”, recalcó Herrera, aunque sostuvo que el que determine cuál será el próximo rival es “un sorteo” que no cambia las cosas, porque Peñarol “intentará salir a ganar para pasar a cuartos de final”.

El Campeón del Siglo estuvo vacío, frío. La sanción que pesaba sobre la parcialidad mirasol terminó ayer: para la próxima instancia el público volverá a las gradas. Herrera subrayó que la hinchada se extraña: “La verdad que es distinto; es difícil jugar sin nuestra gente, que es muy importante para nosotros. Pero ya sabíamos que iba a ser así, nos preparamos para eso. Pudimos hacer puntos en nuestra casa, no nos dio para poder terminar primeros en el grupo, pero sí para pasar a la siguiente ronda”.

“¿Pensás que pasó algo especial con Leo Fernández, que no se lo vio brillar como en otras tardes y noches?” fue la siguiente pregunta, y en la respuesta Herrera defendió a su compañero. “Leo es un crack”, sostuvo, y dio un paso adelante como si fuera el capitán del equipo: “No estoy de acuerdo con lo que decís vos; para mí, Leo es un crack y siempre lo demuestra. Todo el grupo salió a buscar la victoria y no la pudimos conseguir, pero lo intentamos por varios medios”.

La palabra de Ignacio Sosa

Otro que corrió hasta que se cansó fue Ignacio Sosa. Fiel a su estilo, el volante central las peleó todas y desde el callejón del 5 trató de darles juego a sus compañeros. Por momentos, lo hizo bien; en otras ocasiones se vio superado porque los argentinos cerraban espacios y lograban superioridad numérica.

Nacho miró para adelante: “Ahora tenemos que pensar en los octavos. Esa es nuestra mentalidad. Era ganar hoy; no pudimos y ahora queda pensar en octavos”, sintetizó el mediocampista, quien también comentó que el equipo “tuvo chances” de llevarse el partido, pero “no entraron”. Con respecto a los posibles rivales, el campeón del mundo sub 20 fue claro y desafiante: “Que venga el que tenga que venir. Nosotros nos vamos a preparar de la mejor manera para afrontarlo como se debe”.

Con respecto a su rendimiento en la cancha, Sosa dijo estar “contento”, pero agregó que tiene que “trabajar y seguir metiéndole para poder mantenerme: eso es lo más importante”. En ese sentido, habló sobre su compañero en la mitad de la cancha, Eric Remedi, con quien dijo sentirse bien. “Él y cualquiera a quien le toque está preparado para cumplir con el trabajo que nos pide Diego”, afirmó.