Tras la medalla histórica de Julia Paternain y la actuación del resto de los uruguayos, volvió a aparecer la casaca celeste en el Mundial de atletismo de Tokio, Japón.
Déborah Rodríguez compitió en la serie 1 de los 800 metros femenino, y paró el reloj en 2:03.18, siendo octava en su carrera, que tuvo nueve participantes. En la tabla general quedó en el puesto 51 dentro de las 55 clasificadas a la prueba; las mejores tres de cada serie y los tres mejores tiempos restantes avanzaron a semifinales.
Fue el séptimo campeonato del mundo para Rodríguez, de exitosísimo camino dentro del atletismo; clasificó al evento como campeona sudamericana en certamen que se disputó en Mar del Plata. En mundiales ya había corrido en esta distancia en Beijing 2015 y Doha 2019.
El viernes competirán los últimos tres atletas uruguayos
Valentín Soca y Santiago Catrofe competirán en 5.000 metros llanos masculino este viernes. Catrofe viene de representar de buena forma a Uruguay en los Juegos Olímpicos de París, y será su tercer Mundial, pero el primero en esta distancia; ostenta el récord sudamericano, marca con la que consiguió el pasaje. Soca ingresó por la ventana al ser el último clasificado por ranking.
Manuela Rotundo es una de las grandes promesas del atletismo uruguayo; participará en jabalina el próximo viernes, disciplina en la que viene de conseguir la medalla de plata en los Juegos Panamericanos júnior. Tiene el récord nacional.