La continuidad en la trayectoria de los estudiantes es un tema que preocupa a las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), que en los últimos años han desarrollado diversas políticas para favorecer dicha continuidad. Uno de los puntos críticos siempre fue el pasaje de la escuela a la educación media, en el que, por diversos motivos, muchos niños se desvinculan del sistema. Para evitarlo, la ANEP ha hecho en el último tiempo un desarrollo informático que permite monitorear las inscripciones de quienes egresan de la escuela a liceos y UTU, además de identificar a aquellos que no se anotan en ninguna de las opciones.

Antes de que terminara el año lectivo de 2017, se abrió un período de preinscripción para los niños que estaban cursando sexto año, en el que mediante la plataforma digital Gurí, la familia debía marcar tres opciones. En orden de preferencia, se debía indicar tres centros educativos a los que el niño pudiera concurrir en 2018. Si bien no está garantizado que el estudiante quede en la primera opción elegida, luego el liceo o escuela técnica en el que queda anotado se comunica con la familia para que concurra personalmente a confirmar la inscripción.

Según confirmó a la diaria el presidente del Consejo Directivo Central de la ANEP, Wilson Netto, al 29 de diciembre, fecha en que cerró el período de confirmación de las inscripciones, ya está anotado 80,4% de los 39.500 niños que egresaron de la escuela y se preinscribieron en la educación media. Se espera que el restante 20% quede confirmado en febrero, cuando se retomará el período de inscripciones. Además, se identificó a 322 niños de escuelas comunes que no hicieron la preinscripción a tiempo y la ANEP se pondrá en contacto con las familias para anotarlos en la educación media. También se está siguiendo la situación de los niños de las escuelas especiales y rurales. En este último caso, muchas veces la continuidad no resulta sencilla, porque no hay propuestas de liceo o UTU cerca de donde vive el niño. Al respecto, Netto señaló que se están abriendo cursos nuevos, en zonas muy alejadas de centros urbanos.

Mecanismo

La directora general del Consejo de Educación Secundaria (CES) explicó a la diaria que en esta oportunidad, las preinscripciones comenzaron un poco antes que en años anteriores. De esa forma, se buscó acompañar a quienes tienen menos apoyo de sus familias, ya que en esos casos el maestro del curso era quien le insistía al niño y a la familia para que concretaran la preinscripción. “El machaque del maestro permitió que se inscribieran muchos de ellos. El 2 de febrero se retoma la inscripción para que completen los que quedan, que son muy poquitos. Esta ha sido una estrategia muy exitosa, con un aporte maravilloso de primaria”, resumió la jerarca.

Además, Puente señaló que como todos los años, el CES abrirá un “período de pases” para que los niños se cambien de centro. “Nuestra experiencia es que las familias cambian de situación durante el verano o que muchas veces esa asignación inicial no les gusta y piden cambio. Tenemos un flujo de pases que es alto y nos lleva mucho tiempo de febrero e incluso de marzo para responder”, detalló.

En los casos en que no llega la inscripción, el centro de enseñanza media se contacta telefónicamente con la familia; en caso de no tener éxito, se buscan otras vías de contacto. Para esta gestión se vuelve importante la gestión de la Dirección de Integración Educativa de la ANEP, que cuenta con las Unidades Coordinadoras Departamentales de Integración Educativa (UCDIE). En distintos territorios que tienen asignados, con el liderazgo del respectivo coordinador, las UCDIE coordinan con distintos actores para ver de qué forma se puede ir a buscar al joven. “Ahí se define quién visita el hogar y se ve qué está pasando, porque a veces hay situaciones graves que exceden cualquier previsión; también se puede llegar a solucionar el problema, y el chiquilín se inscribe”, resumió Puente.