A partir de las negociaciones entre las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay (CSEU) se profundizaron las políticas en materia de prevención y promoción de la salud laboral de los trabajadores docentes y no docentes. El primero de una serie de cambios que serán más favorables para los funcionarios fue la reforma del sistema de certificaciones médicas. Desde el 1º de marzo los trabajadores pueden solicitar licencia por enfermedad presentando un certificado médico de su propio prestador de salud; hasta ese momento debían concurrir al médico certificador correspondiente al subsistema en el que trabajaban.

A largo plazo, la comisión bipartita ANEP-CSEU –creada en 2011– busca generar un proceso que provoque “un salto cualitativo en la organización del espacio destinado a la salud laboral de los trabajadores de la ANEP”. Como objetivo general, se proponen transformar la actual División de Servicios Médicos en un Servicio de Prevención y Salud.

En una conferencia de prensa en la que se detalló el proceso de trabajo, la integrante del Consejo Directivo Central de la ANEP en representación de los trabajadores, Elizabeth Ivaldi, calificó el cambio de un hito “histórico”. Según explicó, al poner el foco en la prevención se determinan “las enfermedades prevalentes, que tienen su origen o se agravan” en función de las tareas que desarrollan los trabajadores. Según consigna el portal institucional de ANEP, la consejera también señaló que este es el motivo por el que los médicos que trabajan en calidad de certificadores pasan ahora a cumplir un rol de prevención.

Para el presidente del Codicen, Wilson Netto, este cambio elimina una “gran desigualdad” entre los trabajadores metropolitanos y los del resto del país, lo que significa “un gran avance por el respeto y dignidad que merece el trabajador”.

En esa misma instancia, el presidente del directorio del Banco de Previsión Social, Heber Galli, remarcó la importancia de que todos los trabajadores “tengan una misma forma de certificarse”, independientemente del ámbito en el que se desempeñen. Asimismo, comentó que “el nuevo sistema ha funcionado muy bien”. “El mes pasado atendió a 6.500 trabajadores, y muchos de ellos ya no tuvieron que trasladarse de su lugar de residencia para certificarse”, dijo.