El movimiento cooperativo ha impulsado varios proyectos para crear una institución formadora. Este año lograron los acuerdos necesarios para conformar la Escuela Nacional de Cooperativismo, según confirmó a la diaria Ricardo Pisciottano, secretario de la Confederación Uruguaya de Entidades Cooperativas (Cudecoop), órgano en el que orbitará la escuela. El 8 de mayo quedó conformada la nueva institución, con autoridades provisorias. Actualmente se está trabajando en los últimos lineamientos de cada curso, pero se espera que los tres primeros –que apuntarán a cooperativas de ahorro y crédito, trabajo y agrarias– comiencen este semestre.

En estas etapas iniciales la idea es formar a los directivos y líderes de las cooperativas. Pisciottano explicó: “Hoy en día hay empresas cooperativas de un porte tan importante que si no tienen una mínima capacitación se hacen inviables. Cuando se llega a ese punto, se necesita que los que están en la dirección se capaciten, y además es importante ir trabajando con los que vienen atrás, para ir armando un cuadro cooperativo que permita llevar adelante esas cooperativas”. El principal objetivo que se plantean es “contribuir a mejorar las capacidades de las cooperativas con una propuesta integral de educación y promoción del cooperativismo”.

Por el momento, la Comisión Directiva Provisoria está conformada por representantes de las federaciones de cooperativas de vivienda, consumo, de ahorro y crédito y de producción, y están trabajando en las últimas definiciones; por ejemplo, si serán cursos que se repitan de forma sistemática o a demanda, y a cuántos estudiantes podrán acoger en cada oportunidad. Esperan terminar este trabajo en el correr de este mes, para empezar la convocatoria a nivel nacional.

Los primeros destinatarios serán los dirigentes de cooperativas de ahorro y crédito, de trabajo y las agrarias, porque “se entiende como más urgente y que hay más demanda en este momento”, comentó Pisciottano, pero aseguró que a su entender el público puede ser más amplio, ya que “hay algunos sectores que aún no se dan cuenta de que están creciendo y de la falta de conocimiento que tienen sobre algunos aspectos”. A pesar de que los cursos estén dirigidos a esas modalidades, cualquier representante de cooperativas podrá participar; a modo de ejemplo, Pisciottano mencionó que hay cooperativas de vivienda que al proyectar 50 unidades están manejando inversiones que llegan a los cinco millones de dólares.

“Daremos elementos de capacitación elemental para que una cooperativa funcione bien y apuntaremos a la especificidad de cada una de las modalidades”, aclaró. Según el directivo, para las organizaciones “muchas veces es difícil encontrar de forma individual un curso tan específico, y cuando lo encuentran es muy caro”, y aclaró: “Hay cursos generales de gestión o de contabilidad que pueden hacer los directivos de las cooperativas de ahorro y crédito, pero esos cursos o son muy generales o apuntan a empresas capitalistas, con otro contenido. Lo que ofrecemos nosotros es algo específico y hecho para el sistema de cooperativas”. De todas formas, los cursos que ya ofrece Cudecoop en convenio con la Universidad de la República, en las facultades de Ciencias Económicas y de Administración y de Ciencias Sociales, se mantendrán.