Si bien en enseñanza media los cursos terminan estas semanas, el año culminará sin el período de exámenes de diciembre, que se trasladará a febrero. Para inscribirse en la Universidad de la República (Udelar), período que se abre en general en febrero, los estudiantes pueden tener hasta una materia pendiente de aprobación. Si el próximo año la Udelar mantenía ese régimen “íbamos a dejar a una parte de la generación sin poder entrar, en un momento en que estar inserto en el sistema educativo es muy importante”, explicó a la diaria Juan Cristina, prorrector de Enseñanza de la Udelar.
Ante esta situación, la Udelar y la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) buscaron coordinar acciones y, en primer lugar, se generó un período de exámenes extraordinario en marzo para los estudiantes de enseñanza media. Además, el Consejo Directivo Central (CDC) de la Udelar resolvió el martes que sus carreras no comenzarán, para la generación de ingreso, hasta abril.
“El tránsito entre la enseñanza media y los primeros años de universidad son normalmente difíciles, sin pandemia. Esta situación creemos que va a agudizar este tema, y por eso tomamos medidas”, señaló Cristina, quien consideró que los estudiantes que llegan “de la educación privada y algunos liceos públicos más o menos han podido seguir los cursos, pero otra cantidad de liceos vienen con atrasos, o no han podido dar todos los temas”.
Según Cristina, la Udelar admite la inscripción condicional con hasta una materia sin aprobar porque “con más de una previa es muy difícil hacer el primer semestre”, y por eso se han desarrollado programas para apoyar a los estudiantes a preparar ese último examen que, en períodos normales, se da en abril.
Para Cristina, al habilitarse un período de exámenes más y atrasar el calendario se busca dar más chances a los estudiantes para acceder a los estudios universitarios: “No queremos dejar a ningún joven colgado, por fuera del sistema durante un año”. En ese sentido, la resolución señala que se busca “garantizar el acceso con la mayor amplitud posible para los estudiantes que buscan continuar sus estudios”.
Que las carreras comiencen a partir de abril supondrá ajustes en el resto del calendario anual, menos receso entre semestres o una finalización posterior, que resolverá cada facultad. “Es un esfuerzo extra importante para todos nuestros docentes, pero en un caso de emergencia nacional, hay que tratar de hacerlo, y creemos que es una buena noticia para el sistema nacional de educación pública que las instituciones coordinen sus esfuerzos”, señaló Cristina.
Apoyo en el arranque
Por otra parte, el CDC también aprobó este martes la coordinación de una serie de cursos introductorios para todos los estudiantes de la generación de ingreso, que podrán comenzar a dictarse a partir de febrero. Serán sobre algunas de las materias básicas que se abordan en los primeros años, como matemáticas o biología, pero desde una perspectiva propedéutica, es decir, aquellos conocimientos necesarios para abordar la carrera, y en ese mismo sentido también se incluirían cursos de escritura y lectura académica, comprensión lectora o introducción a la vida universitaria.
Los cursos serían virtuales y con algunas instancias presenciales en caso que lo permita la situación epidemiológica, y el objetivo marcado por el CDC es que los cursos puedan dirigirse a estudiantes de distintas carreras de grados o facultades.
Si bien hay distintos servicios universitarios que tienen generados sus propios cursos introductorios, la idea de la Comisión Sectorial de Enseñanza será abarcar temas que “atraviesan distintas áreas de conocimiento”. El rector de la Udelar, Rodrigo Arim, consideró que esta iniciativa será “una política central de urgencia”, simultánea a las acciones que implementen las facultades, y Cristina consideró que esta experiencia excepcional permitirá “sacar elementos para aplicar e implementar maneras para que el salto entre la enseñanza media y la universidad no sea tan brusco”.
Por otro lado, el prorrector comentó que para el próximo año habrá 1.500 estudiantes avanzados formados para ser tutores de quienes recién ingresan, como parte del programa Tutorías entre pares, de forma de tener un acompañamiento que haga la inserción “lo más fácil posible”.