El segundo Simposio de Innovación Educativa para el Aprendizaje (Siembra) de la Universidad Católica del Uruguay (UCU) se hará del 23 al 25 de abril y, a pesar de que aún hay tiempo, el equipo de la organización trabaja desde hace meses en las nuevas propuestas. Con expositores nacionales e internacionales y más de diez talleres se buscará trabajar en cuatro ejes: conceptualizando la innovación; espacios para la innovación; innovación y políticas educativas; buenas prácticas de innovación. Las inscripciones para participar están abiertas, al igual que el segundo llamado a interesados en presentar sus trabajos; los suscriptores de la diaria tienen 25% de descuento en la inscripción.

Ricardo Lema, docente y parte de la organización del evento, adelantó a la diaria que “este es un simposio particular, porque la idea es que no sea un congreso de investigadores, sino que logre unir la producción de conocimiento con la transferencia de ese trabajo al aula”, y agregó: “A veces, en educación, los investigadores estamos encerrados en las universidades y los docentes son los que realmente ejecutan; este simposio busca unir esos aspectos”.

Otra de las particularidades que señaló Lema es que este simposio “se enfoca en la innovación educativa pero acotada al aprendizaje, es decir, no es toda la innovación educativa, sino aquella que tiene un impacto directo en los aprendizajes. La idea es que sea un espacio de encuentro entre la academia y los docentes de los diferentes niveles, que son los que realmente hacen las prácticas a diario. Por eso hay llamados para presentar avances de investigación, pero también llamados a experiencias de los docentes; buscamos que haya un intercambio entre las dos cosas”.

Lema detalló que al hablar de innovación pedagógica se suele tener en cuenta varias prácticas que “no tienen suficiente respaldo de evidencia”; muchas veces son “cosas que están de moda”, que hacen que los estudiantes se diviertan y pasen bien, pero no hay ninguna medición sobre el impacto en el aprendizaje o en la motivación. “En buena medida, lo que queremos con este simposio es acercar prácticas innovadoras pero respaldadas por cierta evidencia. En Uruguay capaz que estamos investigando poco, pero en el mundo todas estas prácticas se están investigando y están validadas”, puntualizó.

Desarrollo tecnológico

Al hablar de innovación educativa, los organizadores apuntan a dos aspectos en particular: el desarrollo tecnológico y los nuevos enfoques pedagógicos. Con respecto al primer punto, Lema comentó que se refieren a lo digital, que es lo más conocido, pero no solamente: “Obviamente lo digital es muy importante en la incorporación de las nuevas tecnologías al aula: hablamos de realidad aumentada, de realidad virtual, de los videojuegos, evidentemente la tecnología digital tiene mucho potencial, pero el desarrollo de un juego de mesa en formato físico también es desarrollo tecnológico y es parte de lo que estamos trabajando”.

Ana Laura Palombo, también docente de la UCU y parte del equipo organizador, enfatizó que “siempre se trabaja en la tecnología adaptada al aula, para que sea una herramienta más, como el papel o el libro. Tenemos que introducir esto en nuestras prácticas, no como algo aislado y específico, sino en la práctica habitual de enseñanza”. En su opinión, los docentes no se han apropiado aún de todas las herramientas que están a su disposición, y por eso parte de los objetivos del simposio es “ir acercando esas cosas a las clases para que, de alguna manera, empiece a ser algo propio del proceso de aprendizaje”.

El foco en el docente y el aprendizaje

Palombo opinó que “hay una necesidad de los docentes, un reclamo de mayores insumos para poder enfrentarse a su realidad de aula, que cada vez es más diversa y les genera más desafíos para poder desarrollar la labor de enseñar. Hay una necesidad a flor de piel de seguir mirando y buscando alternativas que ayuden a mejorar las prácticas, y a eso se apunta”. Para la docente, cada participante podrá decantar los conocimientos según su realidad, “tomarlos y hacerlos propios según los recursos con los que cuenta y los contextos en los que trabaja”.

Que cada docente haga propias las herramientas es algo fundamental para la organización. En este sentido, Lema apuntó: “Si hacemos cambios estructurales y no logramos generar un cambio en la forma de enseñar, en la práctica, en los enfoques, no va a haber un impacto real. Hay que ir empoderando a los docentes con una transformación educativa, y sobre todo, con esta idea de que la innovación es para el aprendizaje. El foco de todo lo que hacemos tiene que ir por ahí”.

Expositores

  • Sylvia Defior (Universidad de Granada, España)
  • Javier González Díaz (Summa, Chile)
  • Katherine Strasser (Edulab, Universidad Católica, Chile)
  • Melina Furman (Universidad de San Andrés, Argentina)
  • Gonzalo Frasca (WeWantToKnow, Uruguay)