El ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, tuvo este jueves su primera actividad pública en un ámbito académico, en ocasión de la asunción de la nueva directiva de la Academia Nacional de Medicina. Allí anunció que en las próximas semanas comenzará un proceso de “reflexión y rediseño del conjunto de la institucionalidad que refiere al desarrollo de la ciencia y la tecnología y la innovación del Uruguay”. Mencionó los problemas “que todo el mundo reconoce” del diseño institucional actual: la acumulación de instituciones en “capas geológicas, que responde a diversas iniciativas que se fueron acumulando a lo largos de los años”, y mencionó una larga lista de organismos dedicados a estos temas: la Dirección para el Desarrollo de la Ciencia y el Conocimiento del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología de Presidencia de la República, el Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (Conicyt), la Academia Nacional de Ciencias, el Programa de Desarrollo de las Ciencias Básicas (Pedeciba), la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), el Instituto Pasteur, el Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable y las unidades dedicadas al desarrollo del conocimiento en organismos como el Instituto Nacional de Carnes.
“Al conjunto le está faltando un poquito de coherencia. Hay superposiciones, hay vacíos, no hay una clara definición de roles: quién diseña políticas, quién las ejecuta, quién las financia, quién las audita, quién las evalúa. Y el país tiene un grado más que suficiente de madurez en este terreno como para tratar de tener una institucionalidad más legible, más simple, más eficaz y más eficiente en el cumplimiento de sus funciones”, afirmó el ministro, que anunció que con el apoyo de la oficina uruguaya de la Unesco el MEC lanzará un programa con este objetivo. La primera etapa será durante este año e implicará el diagnóstico de la situación, el reconocimiento “de las mejores prácticas a nivel internacional y de análisis de los posibles diseños institucionales para poner más orden en esta situación”. Para 2021, Da Silveira anunció cambios normativos “para ajustar el funcionamiento del sistema a las nuevas condiciones que nos demos”.
El ministro aseguró que buscarán que ese proceso sea “escuchando a todos” y dando la oportunidad para que “los involucrados en el sistema de ciencia, tecnología investigación y desarrollo de innovación den su punto de vista, aporten su experiencia y hagan su propuestas”. Dijo que “el sueño” es terminar el proceso “cambiándole el nombre al ministerio, Ministerio de Educación, Cultura y Ciencia”, como “una manera de resaltar una actividad que no siempre tuvo suficiente relieve en el debate público”, y reafirmó que el proceso será “en ese orden: primero cambiar el contenido y luego cambiar la etiqueta”.