Cada vez son más los gobiernos que deciden cerrar escuelas primarias, secundarias y universidades como medida de prevención ante la expansión del Covid-19. La UNESCO actualizó las cifras: hasta este martes eran 363 millones los alumnos en el mundo que no tuvieron clases, desde el nivel preescolar hasta los estudios terciarios, lo que significa que el virus afecta en el plano educativo a uno de cada cinco estudiantes de primaria y secundaria y a uno de cada cuatro de la enseñanza superior. De acuerdo a lo que informó la organización dependiente de la Organización de las Naciones Unidas, 15 países cerraron todas sus escuelas y 14 decidieron cerrarlas en regiones específicas.

Este martes la UNESCO convocó a una reunión en su sede en París para desarrollar estrategias conjuntas a nivel mundial, a fin de disminuir las consecuencias del virus a nivel educativo. Participaron mediante videoconferencia 27 ministros de Educación y 37 representantes ministeriales de países de Asia, Europa y América del Norte. El objetivo de la reunión también fue intercambiar distintas prácticas que impulsaron los países para garantizar la continuidad del aprendizaje de forma virtual, porque, por el momento, el cierre de las instituciones educativas se mantendrá por tiempo indeterminado.

Entre las estrategias que impulsa la organización internacional está la formación de un equipo de tareas de emergencia UNESCO-Covid19, con el objetivo de apoyar “las respuestas nacionales” y compartir “respuestas de política eficaces centrándose en los países más vulnerables”, según anunció la UNESCO en su web. Además, señalan, “se establecerá una comunidad de práctica más amplia para mejorar el intercambio de conocimientos, el aprendizaje entre iguales y la creación de capacidad en materia de aprendizaje abierto y a distancia. La UNESCO se propone movilizar a todas las partes interesadas, incluso del sector privado. Empresas como Microsoft ya han prestado su apoyo técnico al grupo de tareas”.

Tras la reunión con los ministros, la directora general de la UNESCO, la francesa Audrey Azoulay, aseguró: “Estamos entrando en un territorio inexplorado y trabajando con los países para encontrar soluciones de alta tecnología, baja tecnología y sin tecnología para asegurar la continuidad del aprendizaje”, según consigna la página institucional. En esta línea agregó que “al tiempo que los países preparan su respuesta, es vital la cooperación internacional para compartir los enfoques más eficaces y apoyar a los estudiantes, los profesores y las familias. La UNESCO está intensificando su apoyo para garantizar que esta crisis promueva la innovación y la inclusión en lugar de exacerbar las desigualdades en el aprendizaje”.

Por su parte, la italiana Stefania Giannini, subdirectora general de Educación de la UNESCO, sostuvo: “Nos enfrentamos a una situación inusual, con un gran número de países afectados por el mismo problema al mismo tiempo. Necesitamos unirnos no sólo para abordar las consecuencias educativas inmediatas de esta crisis sin precedentes, sino también para aumentar la capacidad de recuperación a largo plazo de los sistemas educativos”.

Recomendaciones

En respuesta al cierre de las instituciones educativas, la UNESCO recomienda el uso de programas de aprendizaje a distancia mediante aplicaciones y plataformas educativas. Aseguran que no sólo docentes y estudiantes deberán incorporar la virtualidad en su rutina, sino también los padres, que en muchos casos también están aislados en sus casas, en varios países de Europa y Asia, por lo que en las últimas semanas surgieron campañas para impulsar el teletrabajo.

Para eso la UNESCO publicó una lista de aplicaciones y plataformas para estudiar a distancia, para hacer videoconferencias a gran escala, para crear cursos virtuales y para mejorar la comunicación entre estudiantes, docentes y padres, a pesar de la distancia. La mayoría de las aplicaciones está en inglés, chino y árabe, pero algunas también tienen soporte en español.

Por otra parte, la UNESCO también publicó una serie de recomendaciones para que las universidades formen adelante. En primer lugar y en línea con lo planteado por la Organización Mundial de la Salud, instan a los centros educativos a divulgar información avalada por los organismos de salud locales, para evitar la desinformación y el alarmismo. Además, recomiendan “cancelar o posponer los programas de intercambios internacionales o de salidas al extranjero, por lo menos aquellos que incluyan entradas o salidas de países afectados por el Covid-19, tanto de estudiantes como de profesorado e investigadores”, y cancelar o suspender reuniones académicas presenciales, como los congresos internacionales.

Problemas de conexión en China

La propagación del Covid-19 comenzó en China y es allí donde 280 millones de alumnos están sin clases desde hace casi dos meses. Desde mediados de febrero el Ministerio de Educación chino instaló una plataforma de educación virtual para los escolares; para asegurar su funcionamiento el gobierno pidió a las empresas de telecomunicación y a los proveedores de internet que aportaran 7.000 servidores, a fin de que hasta 50 millones de personas puedan conectarse simultáneamente, consignó El País de Madrid. Según destacan varios medios internacionales, ayer los escolares chinos lograron sabotear la aplicación del gobierno, puntuándola negativamente en la app store, lo que hizo que dejara de estar anclada y que las tareas no pudieran llegar a los niños.