Adolescentes privados de libertad en INISA podrán participar en distintas propuestas de UTU

El Consejo de Educación Técnico Profesional (CETP-UTU) firmó con el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (INISA) un acuerdo de cooperación para que los jóvenes en conflicto con la ley penal puedan formarse en las distintas propuestas de la UTU. Según explicó en diálogo con la diaria la directora representante de la oposición en el INISA, Andrea Venosa, el convenio apuntará en principio a los 275 adolescentes privados de libertad y en una segunda etapa a los 208 que tienen medidas no privativas.

Según detalló a la diaria el director general de UTU, Juan Pereyra, “la idea por ahora es que los docentes de UTU puedan ir al INISA a dar clase”, aunque también aclaró que está la posibilidad de que aquellos que tengan salidas transitorias y los permisos necesarios puedan ir a las clases en los centros educativos. El viernes el INISA tendrá el resultado de un relevamiento sobre los intereses de los adolescentes que les permitirá definir junto con UTU cuáles serán los primeros cursos de capacitación que se dicten, que comenzarán entre setiembre y octubre. Venosa subrayó la urgencia de que el convenio comience a funcionar este año, ya que por la emergencia sanitaria se suspendieron todas las actividades educativas, por lo que en lo que va de 2020 los adolescentes “han acumulado muchas horas de encierro, que no es lo deseado”.

Por el momento la única forma de terminar la educación media en el INISA es en secundaria; de hecho, es obligatoria durante la privación de libertad. Con este convenio los adolescentes podrán optar si desean seguir en secundaria o quieren culminar su ciclo con formación de UTU. Más allá de los cursos de capacitación puntuales, para Pereyra el principal objetivo es “generar continuidad educativa; tal como funciona el ciclo de Formación Profesional Básica, la educación pública apuesta a cursos que generan continuidad siempre”.

Venosa considera fundamental este tipo de convenios y apostará a seguir trabajando en esa línea. Comentó que está sobre la mesa un acuerdo con el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional y que también le gustaría impulsar el trabajo con las organizaciones sociales, y mencionó como ejemplo al Servicio Paz y Justicia de Uruguay, que ha implementado varios programas con el INISA.

Asimismo, la directora destacó la importancia de “la capacitación a los adolescentes para que salgan con un oficio y diploma y puedan insertarse en el mercado laboral”. Subrayó también que dentro del acuerdo marco está la “capacitación a los propios funcionarios del INISA para desarrollar con los chiquilines distintas actividades recreativas o talleres”. Pereyra indicó que este convenio es “la gran diferencia para estos adolescentes, ya que a veces los contextos de donde vienen no les han permitido transitar la vida con educación”, y agregó: “Nosotros buscamos capacitarlos para que puedan tener un oficio y, una vez que puedan estar en actividad, ganarse la vida dignamente”.