El colectivo Familias Organizadas de la Escuela Pública (FOEP) emitió un comunicado este lunes en “alerta y expectantes ante las medidas que tomará el gobierno nacional en virtud del incremento de casos por covid-19 en los últimos días”. El ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, afirmó en diálogo con la diaria que en la sesión del Consejo de Ministros de este martes se analizarán “todos los escenarios”, incluida la posibilidad de suspender la presencialidad en los centros educativos.

Según las familias, “hay varias acciones para tomar antes de cerrar las escuelas” y, si se opta por ese camino, señalan que “cortar por el eslabón más débil profundizará aún más las brechas que trae la pandemia”. “Debemos hacer los mayores esfuerzos para mantener las escuelas abiertas”, afirman.

Los integrantes de FOEP se mantienen “firmes y en consonancia con las recomendaciones de la comunidad científica nacional e internacional” en que “la escuela debe ser lo primero en abrir y lo último en cerrar”. “Si bien el riesgo cero no existe, en las escuelas el riesgo de contagio es muy bajo y los daños que sufren niños y niñas al no asistir son mucho mayores que los daños asociados a la covid-19”, aseguran.

Recuerdan que desde el comienzo de clases han pedido que se refuerce la información para las familias, que se generen las condiciones en términos presupuestales “para que la escuela sea lo último que se cierre” (auxiliares de limpieza, docentes, espacios y productos de higiene), que se garantice el acceso prioritario a hisopados para el personal de la educación, que se den “lineamientos claros sobre la educación virtual en caso de que se tenga que optar por escenarios híbridos”, y que tanto estudiantes como docentes “accedan a los dispositivos, a la conexión a internet sin costo y a horas docentes destinadas para eso” si es necesario recurrir a la virtualidad.

Colegios privados

La Asociación Uruguaya de Educación Católica (Audec) también manifestó mediante un comunicado su “preocupación por los rumores trascendidos en las últimas horas respecto a la suspensión de clases presenciales”. Señalan que en distintos escenarios de la pandemia se llegó siempre “a la misma conclusión: la presencialidad en la educación de los niños, niñas y adolescentes es imprescindible y es un derecho que nos sentimos en la obligación de defender”.

Mencionan que la mayoría de los casos positivos en escuelas y liceos tienen origen en contagios intrafamiliares, y reafirman que teniendo en cuenta los protocolos, “los centros educativos son lugares seguros”. “Estamos convencidos de que las escuelas deben ser los últimos lugares en cerrar si lo que se busca es bajar la movilidad. No hagamos que los niños, niñas y adolescentes sufran las consecuencias de los adultos que no hemos tomado conciencia”, señalan.

Audec nuclea a 157 colegios católicos y a 170 proyectos de educación no formal: “Acompañamos de cerca las dificultades y las consecuencias de la falta de presencialidad y la brecha que eso generó en nuestra sociedad. Queremos aprender de eso”, concluyen en el comunicado.