Estudiantes de Fisioterapia de la Escuela Universitaria de Tecnología Médica (EUTM), que pertenece a la Facultad de Medicina, manifestaron ante la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Diputados a principios de mes que están “preocupados” por el “caso omiso” que hace el Consejo de la facultad “ante la solicitud de recursos básicos”.

Melani Fernández y Diego Varela, integrantes del Movimiento Estudiantil de Fisioterapia, dijeron que en los últimos cinco años en la carrera aumentaron “exponencialmente” los inscriptos, pero no lo hicieron de la misma forma los recursos. Por ejemplo, advirtieron, en una de las generaciones, que no llega a 90 estudiantes, hay “escasez de docentes, de espacios de práctica” y “de materiales”, según consta en la versión taquigráfica.

De acuerdo con los datos a los que pudo acceder la diaria, en Fisioterapia, este año, se inscribieron unas 1.805 personas pero ingresaron sólo 338, es decir, unas 1.467 quedaron fuera de la carrera. Pero no es sólo en Fisioterapia que hubo problemas por los cupos. En total, en la EUTM, que reúne unos 18 cursos, en 2021 se inscribieron unas 8.817 personas pero sólo 2.724 lograron quedar en la institución. “Es un escándalo”, dijo a la diaria el director de Psicomotricidad, Juan Mila. En cambio, en Paysandú, donde operan algunos cursos de la EUTM, en Fisioterapia sobraron tres lugares (había 148 cupos y 145 personas ingresaron).

El 9 de marzo de 2020 los estudiantes manifestaron al Consejo que se había “colapsado” y que iba a ser “prácticamente imposible” comenzar los cursos. “Ante esto”, dijo Fernández, “se hizo caso omiso total, y con la llegada de la pandemia la virtualidad fue la excusa perfecta para archivar nuestra situación, y seguimos sin respuestas”. El 14 de abril de este año hicieron lo mismo, pero según los estudiantes el decano de Medicina, Miguel Martínez, dijo: “Pasemos a otra cosa”. Para esta nota la diaria intentó consultar al decano, sin éxito.

Los estudiantes trasladaron su preocupación por estos problemas al rector de la Universidad de la República (Udelar), Rodrigo Arim, de quien tampoco obtuvieron una respuesta. Para recaudar fondos para la compra de materiales, el movimiento estudiantil hizo una rifa.

Fernández dijo que el movimiento comenzó a hacer “mucha prensa” por los reclamos porque “agotaron todos los recursos” institucionales. Afirmó que el decano les dijo, en tono de burla, que pidieran “recursos a los Reyes Magos”. “Nos preocupa bastante que quien tiene que velar por nuestros recursos no sólo hace caso omiso a esta situación, sino que ignora que hay estudiantes que no pueden formarse y llega al punto de burlarse”, se quejó.

Por su parte, Varela dijo que “lo que ha hecho Medicina es priorizar otras cosas”, y afirmó: “Cuando pedimos los cinco cargos se nos dijo que no y a la semana se aprobó un cargo grado 3 para decanato, y cabe mencionar que con ese grado 3 se pagan tres docentes nuestros. Es decir, hay una mala distribución”.

En principio, sostuvo, “se nos decía que era por falta de presupuesto, pero después nos dimos cuenta de que se aumentaban los cupos. Si se aumentan los cupos en una facultad que tiene ingreso limitado es porque se tiene [recursos] para atender a esas personas. No era el caso; ingresaron más personas y seguimos con las mismas limitantes”.

Según Varela, el presupuesto es el mismo de 2014, pero los estudiantes son más del triple. “Se ha hecho un constante incremento de los cupos, que no ha sido acompañado por recursos”, lamentó, y ratificó su preocupación. La Facultad de Medicina, no obstante, “tiene un rojo histórico porque siempre hay un gasto mayor de egreso que de ingreso. Hoy no está en condiciones de dar más cargos”, expresó Patricia Manzoni, directora de la EUTM.

Las soluciones y los tiempos

Manzoni dijo a la diaria que el reclamo de los estudiantes “es fundado porque afecta a sus posibilidades de hacer prácticas en las mejores condiciones”. La decisión de los nuevos cargos no depende de la comisión directiva de la EUTM, sino del Consejo de Medicina, por eso “el ataque” al decano, dijo la directora. Para encontrar una solución, afirmó, se está apostando a convenios y a la creación de comisiones entre cátedras y carreras para optimizar recursos.

En tanto, Carlos Planel, director de Fisioterapia en la EUTM, dijo a la diaria que las decisiones políticas de aumento del ingreso “fueron trayendo mayor cantidad de estudiantes”. El profesional añadió que ellos veían que año a año aumentaba el número de estudiantes que se inscribían y agregó: “Hace tres o cuatro años empezamos a hacer los planteos de que el crecimiento era muy grande”. En ese sentido, resaltó que el crecimiento de la fisioterapia ha sido “impresionante” no sólo en el país sino en todo el mundo. “La fisioterapia está dentro de las carreras jóvenes, pero con un crecimiento sostenido y con cambios de paradigmas asistenciales en el medio”, expresó.

Planel expresó que “hay señales” de que van por “buen camino” para solucionar estos problemas, pero el problema son los tiempos, dijo. “Estamos en una situación muy difícil. Con o sin pandemia, esto hubiese pasado, pero la pandemia lo agravó aún más”, dijo, y recordó que en marzo de 2020, antes de que el gobierno decretara la emergencia sanitaria, el equipo docente de la carrera había decidido “acompañar la decisión de los estudiantes de no comenzar los cursos de segundo año hasta tanto no estuvieran los recursos para que se pudiera dictar el segundo año”, para evitar que después de cursar primer año los estudiantes quedaran sin posibilidades de continuar.

El director de Fisioterapia dijo que lo que hicieron fue “usar los medios y optimizar recursos en la parte teórica”. “Nosotros trabajamos con el cuerpo, eso lleva un tiempo de aprendizaje, no lo agarrás en un libro y en un teórico”, agregó. “Saber poner a un paciente en una cama, pararlo, enseñarle a caminar... Uno siempre está trabajando, tocando, agarrando, moviendo, y eso lleva a tener muchas horas prácticas. Lo que tenemos es un desfasaje de tiempos, resoluciones políticas y acciones que puedan llevar el proceso de enseñanza-aprendizaje a los estudiantes de una forma acorde. Los pasos, en ese sentido, se están dando. Los estudiantes están muy preocupados y nosotros también, pero creemos que vamos por el camino que hay que ir”, manifestó.

En la misma línea que Planel, el director de Psicomotricidad, Mila, destacó el “esfuerzo” del decano y de la dirección de la EUTM, de los integrantes del Consejo de Medicina y de “todos los actores para realizar transformaciones del histórico statu quo de la facultad, en el sentido de concebir la integración de las diferentes carreras de grado y posgrado”. Agregó que “este proceso tendrá diferentes momentos y velocidades, pero es claro que se ha avanzado y que hay que continuar avanzando”. La situación para la Udelar “está complicada”, coinciden los consultados, por eso en este momento no hay condiciones para una apertura libre. Y el “divorcio” entre la Universidad y el gobierno tiene algo que ver.