Una delegación de la Universidad Tecnológica (UTEC) concurrirá este jueves a la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda de la Cámara de Representantes para dar a conocer su rendición de cuentas y las proyecciones para los próximos años hasta el fin del período. El pedido presupuestal que presentarán ante los legisladores será de poco más de 98 millones de pesos como refuerzo para el año próximo.

Esa petición es para la finalización de las carreras en desarrollo. En el informe, al que tuvo acceso la diaria, indican que “hay carreras cuya continuidad depende del inicio de nuevos semestres y unidades curriculares en 2022, por eso se incluye la necesidad de contratar nuevas horas docentes”.

Asimismo, el dinero pedido es también para “expandir” la presencia de la UTEC en el país. De acuerdo a la Planificación Estratégica para el período –2021-2025–, la institución “se ha trazado el objetivo de desembarcar en la zona este del país para llevar oportunidades de formación terciaria universitaria”.

En diálogo con la diaria, el consejero Rodolfo Silveira sostuvo que este jueves contarán “un poco” cuáles son los próximos pasos de la UTEC. La idea es extenderse a departamentos que aún están “desatendidos” por esa casa de estudios; por ejemplo, Lavalleja, Treinta y Tres y Cerro Largo.

“Nuestros planteos son bien claros: por un lado, tener una mayor extensión territorial, una mayor oferta educativa y de otro tipo de actividades como son los espacios que están muy vinculados al mundo del trabajo y a la previsible y esperable reconversión laboral de un mundo tecnológico que sigue creciendo, en una realidad en que el entramado productivo está cambiando más aceleradamente que lo que venía siendo”, dijo. Ese entramado productivo, lógicamente, “se apoya o tiene un eje central en la formación y la capacitación”, agregó.

Para Silveira se trata de un incremento “muy moderado”, puesto que corresponde a menos de 10% de lo ejecutado en 2020. “Estamos hablando de muy poco [dinero] significativamente en lo que hace a los presupuestos educativos, o sea que parece un presupuesto razonable, muy conservador; hicimos una gran reingeniería de números y eso permite continuar estas acciones”, expresó.

De acuerdo al informe, al iniciar este año se superaron los 4.000 estudiantes en la UTEC, distribuidos en 11 sedes; se logró que la generación 2021 “sea la más grande de la historia”, con 916 nuevos estudiantes; se ofreció, por primera vez, una doble titulación como en la Licenciatura en Alimentos, y Ciencia y Tecnología de Lácteos y, por último, se lanzó el primer entrenamiento intensivo en programación, de diez semanas de duración y “con rápida inserción laboral”.

En relación a los principales “desafíos para el futuro”, se propusieron “continuar” contribuyendo en la “igualdad de oportunidades para aumentar el acceso a la educación universitaria pública, gratuita y de calidad en el interior del país, con fuerte conexión con el sector productivo”.

El estudio indica que hasta el año pasado por esa casa de estudios transitaron “cerca de 5.550 personas”. “Estudiantes que cursan tecnicaturas, tecnólogos, licenciaturas, ingenierías, posgrados y diplomas para la formación profesional permanente. Entre ellos también hay emprendedores de 13 departamentos que, con sus 98 proyectos, buscan desarrollar sus iniciativas con el asesoramiento de la universidad. A través de nuestra oferta educativa y actividades de vinculación abiertas a la comunidad buscamos seguir generando oportunidades de desarrollo en el interior del país”, agrega.

A su vez, sostienen que sólo en 2020 más de 1.300 personas participaron en actividades de formación continua y cerca de 12.000 lo hicieron en “instancias de divulgación de conocimiento”. “El 26% de la población de Montevideo accedió a formación universitaria terciaria, mientras que en el interior las cifras oscilan entre 9% y 4% según los departamentos. La educación terciaria es el nivel educativo peor distribuido en el territorio nacional”, añade.

Por último, apuntaron que el aprendizaje del año pasado por la pandemia estuvo signado por la virtualidad completa y por la “hibridez educativa”, según Silveira. “Fue un año especial, un año de un cambio muy importante en lo que hace a todo el proceso educativo y de gestión de la propia universidad. La UTEC está construida sobre una plataforma digital, pero la pandemia lo apuró, o sea que vamos a rendir cuentas sobre eso”, concluyó el consejero.