Desde las 6.30, trabajadores de la UTU del Cerro realizan un paro por recortes presupuestales en la institución. La queja está motivada en la “eliminación de la figura del educador, ausencia de equipos multidisciplinarios, la supresión de situación de acoso laboral y violencia de género” y, además, por la “eliminación de partidas y horas extras para funcionarios administrativos” y el “nulo convenio que hay con las emergencias móviles”.
Pablo Garay, integrante de la Asociación de Funcionarios de UTU y docente de ese centro educativo, relató a la diaria que paran por “el recorte, la extirpación de recursos impresionante y la precarización de la educación”. “Se está sacando la figura del educador, del psicólogo. No hay equipo multidisciplinario con formación social que acompañe a los chiquilines”, criticó, y cuestionó que en una UTU donde se dan clases de gastronomía y carpintería no haya una emergencia móvil: “Si alguien se corta el dedo, no hay nada”.
Garay sostuvo que para las autoridades de la educación “parece que la educación es tirar a la gente entre cuatro paredes y ya está”. “Cada vez somos menos intentando tapar el hacha, y los gurises van dejando y se van perdiendo por el camino, porque ni siquiera te da el tiempo para hacerles una llamada”, lamentó.
Intervención
“Desalojen”. Ese fue el mensaje claro que hicieron llegar desde la Dirección General de Educación Técnico Profesional por medio del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, que acudió al centro educativo a hacer el pedido a los profesores. Sobre las negociaciones que intentaron tener con el director de UTU, Juan Pereyra, Garay sostuvo que “nos toman como unos niños bufones” porque “para ellos no es necesario hablar”. “El mensaje fue el siguiente: ‘desalojen’. No hay una invitación ni siquiera a conversar con nosotros”, agregó el integrante de Afutu.
Desde las 13.30 la Policía está inspeccionando la UTU cerrense en busca de algún objeto dañado durante la ocupación, según supo la diaria. La idea es que desalojen “cuanto antes”, en el marco del artículo 392 de la ley de urgente consideración (LUC), promulgada hace más de un año. Más allá de que la prohibición de ocupación de oficinas públicas está vigente desde hace años, el mencionado artículo de la LUC refiere a la “libertad de trabajo y derecho de la dirección de la empresa”.
En ese sentido, en la ley se expresa que “el Estado garantizará el ejercicio pacífico del derecho de huelga, el derecho de los no huelguistas a acceder y trabajar en los respectivos establecimientos y el derecho de la dirección de las empresas a ingresar a las instalaciones libremente”. Este es uno de los 135 artículos que se busca derogar mediante referéndum.
Garay, en tanto, dijo que “la idea es pujar cuanto podamos” de forma “pacífica” para lograr dialogar con las autoridades. “Queremos entablar un diálogo, si nos dicen ‘andate’ y nos vamos, incluso es conveniente. Te dejamos parar y después de que estés seis horas todo se queda en la nada. No queremos eso. Vamos a estar lo que podamos, pacíficamente, hasta que nos retiren”, sostuvo.
Por otra parte, este lunes el núcleo de base de la escuela técnica de Santa Catalina denunció que “día a día” sufren “las mismas problemáticas” que la UTU del Cerro. “En Santa Catalina contamos con cuatro adscriptos para 700 estudiantes”, expresaron en un comunicado, y aseguraron que de 12.00 a 14.00 “directamente” no hay adscriptos.
“Los administrativos están desbordados de tarea mientras se le retiraron las horas extras y la faltante de auxiliares de servicio se cubren con contratos mensuales extremadamente precarizados. A su vez, la actual crisis sanitaria, económica y social dejó al descubierto la gran carencia del sistema educativo actual para contener a los estudiantes, generándose un sinfín de situaciones emergentes que no están siendo atendidas como deben, apelando siempre a la buena voluntad de trabajadores que no tienen la capacitación necesaria y deben desatender su verdadero rol para esto”, criticaron.