El senador del Frente Amplio Sebastián Sabini se sumó este martes a la preocupación que expresaron distintos colectivos del Consejo de Formación en Educación (CFE) sobre lo que ocurrirá en el organismo a partir del año que viene. Días atrás, el Sindicato de Docentes de Formación en Educación (Sidfe) denunció públicamente que el año próximo habrá 166 grupos menos en cursos de segundo a cuarto año, en los que no se aplicarán los cambios curriculares. Además, el Sidfe planteó que hay 34 grupos con inscripción condicional y que toda esta situación afectará principalmente a centros del interior.

Al respecto, Sabini sostuvo que esta situación se da en un contexto de “aumento exponencial” de la matrícula del CFE, que pasó de 13.000 estudiantes en el año 2000 a 36.000 en la actualidad. Según agregó, en los últimos años ello había ido acompañado de incremento presupuestal, el cual “se detuvo” en los últimos dos años. Por lo tanto, señaló que contar con menos grupos traerá “consecuencias” en el número de estudiantes por grupo y en “la calidad educativa”.

Consultado por la diaria, el presidente del CFE, Víctor Pizzichillo, explicó que la reducción de grupos para el año entrante tiene que ver con la cantidad de estudiantes dispuestos a cursarlos. “En algunos cursos tenemos una proyección de matrícula hacia 2023 donde no tendríamos estudiantes que los cursen. Algunos cursos de esos se han dejado sujetos a inscripción y otros se han bajado”, explicó, y añadió que si no se proyectan estudiantes que los cursen esta oferta no se abrirá. Además, dijo que en otros casos “se han revisado las decisiones que se han tomado, a la luz de que hay otros estudiantes que estarían dispuestos a cursar y, por tanto, podría constituirse el grupo”.

Sobre la manera en que se conforma la oferta educativa de un año a otro, Pizzichillo reconoció que “a veces los mecanismos que se usan capaz no serían los mejores”, y que “es un tema que hay que trabajar”. Según planteó, “es normal que los grupos queden sujetos a inscripción o que se reajusten”, ya que “depende de cómo evoluciona la matrícula y de cómo van siendo los procesos de los estudiantes”: “La oferta nunca es estática”, recalcó.

Desde el Sidfe y algunos centros de estudiantes del interior han rechazado que varios cursos pasarán a ser virtuales y dejará de haber la posibilidad de asistir de forma presencial. Al respecto, Pizzichillo dijo que ello se debe a situaciones que se presentan principalmente en algunos centros del interior en los que, por ejemplo, se da que hay dos estudiantes anotados para la modalidad presencial y dos para el curso virtual. Según dijo, en esos casos el CFE definió que la oferta sea únicamente en la modalidad virtual, algo que han rechazado la consejera docente en el organismo, Rosana Cortazzo, y el representante estudiantil, Ramiro Dutra.

Pizzichillo detalló que ello no ocurre en todos los cursos de un mismo grupo sino en algunos, y que se optó por el pasaje a la virtualidad “para poder mantener abierta la oferta en ese centro”. Según consideró, “es necesario mantener las ofertas en los centros del interior para que se mantenga la posibilidad de estudiar en una determinada región” y, por otro lado, también deben considerarse “algunas cuestiones vinculadas al ámbito laboral”. Según dijo, “en algunas especialidades es muy preocupante el bajo número de estudiantes”, lo que en muchos casos va “atado a qué posibilidad laboral tiene esa oferta”. Por su parte, detalló que esa situación se da en algunas especialidades de profesorado para la educación media.

Preocupado por la transformación educativa

En su intervención realizada el martes en la media hora previa del Senado, Sabini también se mostró preocupado por algunas acciones que ha tomado el CFE en el marco de la reforma curricular que se comenzará a aplicar el año que viene en el primer año de todas las carreras. En ese sentido, dijo que “los docentes están tomando sus cursos sin saber cuáles son los programas que van a tener que aplicar el año que viene” ni tampoco “cuál es el sistema de pasaje de grado” que se aplicará a los estudiantes.

Además, sobre las grillas de materias que el Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) aprobó la semana pasada, y señaló que “se eliminaron más de 60 asignaturas sin ningún tipo de justificación”. Según valoró Sabini, este escenario hará que el inicio de cursos vaya a ser “caótico” el año próximo, también porque ocurrirá un “desplazamiento de profesores de formación en educación al resto de los subsistemas” de ANEP.

A nivel general, el senador consideró que el proceso de cambio curricular comenzó “tardíamente” y ahora las autoridades tienen un “apuro muy grande” de cara a la implementación, lo que hace imposible que se genere “un espacio de diálogo”, como reclaman los principales colectivos docentes que buscan incidir en los cambios. Al respecto, recordó que el primer documento de la reforma curricular en el CFE se aprobó en julio de este año y se trató de un documento en el que se cometió plagio y tenía varios errores.