El núcleo sindical del liceo 57 de Montevideo denunció “prepotencia” y un intento de “injerencia” policial en el centro educativo durante una mesa de examen. Según un comunicado replicado por la filial montevideana de la Asociación de Docentes de Educación Secundaria, el 14 de febrero un tribunal de profesores estaba tomando un examen cuando la directora del centro educativo les dijo en tono “informal” y “jocoso” que más temprano oficiales policiales se habían hecho presentes en el centro educativo.

En una primera instancia, los docentes fueron informados de que los policías consultaron “por la cantidad de estudiantes que debían rendir el examen y por la cantidad que no lo aprobaban”. Además, el comunicado afirma que los policías informaron a la dirección del liceo que “había una denuncia en la que un padre acusó a un docente de la mesa de maltrato” a un estudiante.

Los profesores sindicalizados consideran que lo ocurrido “es una intromisión en la actividad de un centro educativo por parte de, nada más ni nada menos, las fuerzas represivas”, lo cual viola sus “derechos, libertades y garantías” como trabajadores y como docentes. “Este tipo de acciones buscan interferir en las decisiones pedagógicas y vulneran profundamente la educación pública, sentando un precedente gravísimo. Entendemos que no es un hecho aislado. Es parte de un contexto de avance reaccionario”, sostiene el comunicado.

En ese sentido, afirman que los 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC) que se someterán a referéndum el 27 de marzo “incluyen un arsenal de artículos represivos que, junto con otras disposiciones, otorgan más autonomía a la Policía”. “Este paquete y toda la política del gobierno de derecha y ultraderecha con componentes fascistas envalentonan a la Policía, profundizándose el abuso y la represión. Asimismo, hay que tener en cuenta que la LUC estipula el ingreso de la Policía a organismos de la educación por un lado y restringe la libertad de cátedra por otro”, sostiene el núcleo sindical.

Además, se afirma que el episodio se dio en un marco en el que “el gobierno arremete contra los sindicatos de la educación” y contra el colectivo docente, principalmente a través de discursos mediáticos de desprestigio, “excesivos controles”, “verticalazos” y “numerosos casos de persecución”. Por su parte, los profesores sindicalizados entienden que también hubo “omisión”, “inoperancia”, “falta de seriedad y de prolijidad” de la dirección del liceo. Según denuncian, la directora brindó información de forma “parcial, vaga y confusa”.

Los docentes del liceo 57 consideran “grave” que, “desconociendo toda la normativa”, la directora no haya puesto límites a los requerimientos de la Policía. Según el comunicado, sin haber consultado a la mesa de examen, la respuesta de la directora a los oficiales fue que el supuesto maltrato podía haberse dado a causa del “cansancio de los docentes”. Ante esa situación, los profesores sindicalizados reclamaron saber más sobre el caso y solicitaron a la dirección del liceo que hiciera una consulta ante la seccional policial de la zona. El comunicado señala que la directora informó a los docentes que el comisario le dijo “que no existió ninguna denuncia” y “que se trató de un procedimiento irregular”, lo que “ameritaba una investigación interna”. Según el relato, el comisario preguntó a la directora si desde el liceo deseaban hacer una denuncia por la situación vivida, pero la docente respondió que “no era necesario”.

Por ello, el núcleo sindical entiende que la dirección del liceo “se negó a hacer lo que corresponde a nivel institucional en un caso así”, lo que hubiera contribuido a que no quede “en la impunidad”. En ese sentido, los profesores sindicalizados del centro educativo resolvieron presentar una denuncia ante la Dirección General de Educación Secundaria.