La gestión de Jenifer Cherro en la Dirección General de Educación Secundaria (DGES) ha sido motivo de polémica por distintos motivos. Uno de los principales es la constante confrontación con los sindicatos de trabajadores del organismo, que la han acusado de persecución antisindical y de coartar la libertad de expresión de algunos docentes. Incluso, la ex directora general de Secundaria Celsa Puente dijo que ese tipo de medidas se extienden a cargos técnicos, como las inspecciones del organismo, con las que Cherro está generando “una barrida” contra quienes puedan cuestionarla, según valoró.
Consultado por la diaria, el presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva, desestimó esas acusaciones y consideró que la DGES “está funcionando con una conducción firme, con una dirección que está cambiando muchas cosas que estaban mal en Secundaria”. Silva señaló que ya cuando integraba el Codicen como consejero electo por los docentes había planteado que “Secundaria estaba muy mal en su gestión”. En ese sentido, afirmó que con su respaldo Cherro está “poniendo en orden una cantidad de cosas y algunos modos de proceder”. “Se está diciendo que las cosas han cambiado, hay determinados procedimientos y reglas a cumplir”, agregó el presidente del Codicen.
Consultado sobre la situación de Ariel Firpp, a quien Cherro no le renovó el contrato como inspector coordinador de asignaturas del organismo y terminó su vínculo con la institución el 1° de marzo, Silva dijo tener “excelente relación” y “un respeto profesional” por el profesor de matemática, y explicó su cese por “un cambio de criterio”. “Ariel Fripp tenía un cargo interino al cual había entrado por llamado a aspiraciones y el plazo de ese cargo había vencido. La dirección general entendió pertinente, como lo hizo la anterior directora, organizar la inspección ‒que es una pata técnica y pedagógica muy importante‒ de otra manera, a través de una inspección general y dos subinspecciones que atienden distintas temáticas: asignaturas e institutos y liceos. Y eso no es perseguir a nadie, es organizar las cosas de otra manera. No me consta que haya persecución, pero quien tenga la sospecha, quien se sienta en esa situación, que lo denuncie y lo investigamos”, dijo el jerarca.
Posgrado Cherro
En diciembre, la diaria informó que Cherro incluyó en su currículum un “posgrado en comunicación organizacional” que en realidad era un curso de educación permanente, dos tipos de formación que la Universidad de la República diferencia claramente. En ese momento, el Codicen escuchó las explicaciones de la jerarca y ratificó la confianza en ella.
Consultado sobre si no hubiera correspondido una investigación para determinar si la jerarca hizo valer ese mérito en alguna instancia anterior dentro de Secundaria, el jerarca respondió que “los llamados a aspiraciones y los concursos tienen evaluación en función de la acreditación” de los méritos. “Una cosa es cuando uno se presenta a un cargo político, que es cuando uno presenta un currículum con una enumeración de lo que tiene. En los concursos y en los llamados en la ANEP si yo digo que tengo un posgrado lo tengo que acreditar. No hay ningún llamado ni ningún concurso que se realice por una enumeración de méritos que yo creo tener. En el caso de la directora Cherro, si lo presentó ‒puede no haberlo hecho porque no está relacionado con su función‒ habrá presentado la constancia correspondiente que decía que era un curso de educación permanente”, planteó.
En suma, consideró que en el caso de Cherro “hubo una incorrecta identificación en una página web de lo que se entendía era un posgrado”, formación que incluso se nombró de esa manera en el acto de asunción de su cargo. Además, dijo que “no es un posgrado como tal, pero estrictamente es un curso de posgrado”, porque, en el caso de la jerarca, esta realizó la formación después de egresar, según fundamentó. El presidente del Codicen valoró que la situación “se solucionó de la mejor manera: reconociendo que hubo un error en la identificación y cambiando la página web”.
Silva desestimó una posible preocupación por cómo pueda ser vista la titular de la DGES por los docentes a causa de haber cometido esa equivocación. Al respecto, respondió que Cherro “no dijo tener una formación que no tiene” y “en el peor de los escenarios identificó mal una formación que tiene, de varios meses y de una carga horaria importante”. “La profesora Cherro no es una improvisada que llega a la educación por ser amiga de fulano o mengano, es una persona que tiene muchísima trayectoria. Tiene lo que es muy importante en la educación, que es título docente y luego otro conjunto de formaciones y un destacado desempeño profesional como adscripta, docente, directora e inspectora. Todo con base en llamados a concursos. También tiene un desempeño en la gestión institucional de la organización. El cuerpo docente, más allá de las discrepancias o de las coincidencias con la profesora Cherro, tiene que tener la tranquilidad de que tiene una profesional de trayectoria y formada al frente de la educación, como no siempre pasó”, concluyó.