Hace dos semanas que la educación está en conflicto en contra de la reforma que impulsan las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), particularmente los centros de Formación en Educación, entre los que está el Instituto de Profesores Artigas (IPA). Este viernes, el Centro de Estudiantes del IPA (Ceipa) dio una conferencia de prensa en la que evaluó los últimos días de movilizaciones y estimó los próximos pasos a seguir. En diálogo con la diaria, la vocera del gremio, Gimena Brusciano, dijo que no descartan profundizar las medidas y llegar a la huelga en la educación.
Brusciano recordó que para los estudiantes la última instancia de negociación con las autoridades del Consejo de Formación en Educación (CFE) fue “nefasta”. “Nosotros aceptamos ir a una mesa de negociación pensando que se iban a tomar en cuenta los puntos que vamos a reivindicar, íbamos a negociar con el CFE. Lo que sucedió fue que el rechazo del CFE fue inminente, no se nos dio chance a decir que estamos dispuestos a negociar”.
Comentó que “la huelga está planteada, estamos esperando a ver cómo avanza el proceso” y que “las decisiones se toman en conjunto con otros centros del CFE en el interior y con el sindicato de profesores”. Agregó que la medida de huelga implicaría que todos los centros se adhieran, que el sindicato también se sume y hacer paros indefinidos y ocupaciones”.
Asimismo, Brusciano opinó sobre la postura del consejero de la ANEP Juan Gabito, quien planteó que “hay que hacer una denuncia penal” a estudiantes y docentes por daños en locales de ANEP durante ocupaciones”. Para la gremialista, todos los estudiantes entienden “a nuestra casa de estudios como nuestra y jamás seríamos capaces de dañar la parte de adentro, no entiendo el comentario de Gabito. Queremos poder tener un intercambio con las autoridades y esa no es la forma”.
Por otra parte, en una rueda de prensa, Maximiliano Santos, vocero del Ceipa, leyó un comunicado del centro. “Luego de casi dos semanas de ocupaciones, paros, talleres y movilizaciones, podemos afirmar que hay una victoria en tanto avanzamos en el plano de desarrollo y organización a nivel nacional, cuestión fundamental para lograr nuestras reivindicaciones, que, afirmamos, son las de las mayorías de docentes y estudiantes”, planteó, y subrayó que lograron movilizar a 27 centros de los 32 que tiene el CFE en el país.
Santos señaló que “no hay desde las autoridades políticas del CFE una intención de darnos respuestas a ni siquiera un punto de los 10 de nuestra plataforma; es por ello que seguiremos con las medidas y profundizaremos la lucha, ya que la aplicación de esta reforma será un antes y un después para nuestra formación y la de las futuras generaciones, además de que afectará a la educación pública a la que van todos los hijos de trabajadores”.
Además, se refirió a los dichos del presidente Luis Lacalle Pou, quien en el acto por la Declaratoria de la Independencia dijo sobre las movilizaciones de la educación: “No sé qué los inspira, pero el gobierno no va a frenar”, y a la salida de la Piedra Alta se detuvo para escuchar los cánticos de los manifestantes: “Me están diciendo ‘hijo de puta’”, planteó.
Según los estudiantes, para el presidente “siempre pagan el plato los que más lo necesitan”, pero “el problema que no sabe el presidente y que no están dispuestas a reconocer las autoridades es que las necesidades de los y las estudiantes no son una transformación curricular sino más salones, arreglos de la infraestructura, becas, espacios de participación, entre tantas cosas que le podemos señalar al presidente, ya que habitamos las instituciones que se quiere reformar”.