Con estudiantes en la puerta y luego cortando la calle, este lunes transcurrió la primera mesa de negociación entre el Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y estudiantes de Formación en Educación de todo el país desde que estos comenzaron las ocupaciones y movilizaciones.
Durante casi tres horas, el presidente del Codicen de la ANEP, Robert Silva, junto a los consejeros políticos Juan Gabito y Dora Graziano y uno de los electos por los docentes, Julián Mazzoni, recibieron a una delegación de 15 voceros de casi 20 centros de formación docente, que forman la Coordinación de Centros de Formación en Educación. Así lo explicó a la diaria Georgina Bustelo, vocera del Centro de Estudiantes del Instituto de Profesores de Artigas (Ceipa) e integrante de la Coordinación.
“Esto es un logro tras las medidas de lucha y los movimientos que hemos hecho”, dijo Lucas Valessi, estudiante del Instituto de Formación Docente de la Costa, una vez finalizada la reunión. Según afirmó en una rueda de prensa, “los estudiantes vinimos con una plataforma clara, que venimos sosteniendo desde el principio con muchos argumentos”. Sin embargo, sostuvo que se llevaron cierto “grado de decepción” porque no hubo “tanta respuesta” con propuestas concretas de las autoridades. Destacó, aun así, “que el diálogo quedó abierto”.
Silva, en cambio, dijo a la prensa que solicitaron a los estudiantes los argumentos por los que están en desacuerdo con la reforma educativa “y se nos dijo que va a ser en otra instancia”. Por otro lado, el jerarca les pidió que “deben analizar en el seno de cada uno de los gremios las medidas de ocupación que están llevando adelante”, porque entiende que esta medida “vulnera derechos de miles de estudiantes” y también de trabajadores”. Asimismo, solicitaron a los estudiantes que “no vandalicen más las fachadas” de los centros educativos.
“Ahí hubo un momento poco oportuno de la discusión, un intercambio de posiciones”, dijo al respecto Valessi. Según afirmó, la situación se produjo “sobre el final” y “no se dio espacio a dialogar”. Igualmente, afirmó que “como estudiantes tenemos que seguir: hay cosas en las que tenemos claro que no vamos a aflojar, hay otras que son más negociables”. En resumidas cuentas, los estudiantes están “dispuestos a seguir las medidas de lucha, pero también [a mantener] estos espacios de negociación”.
Sobre la mesa
Bustelo especificó que la cantidad de estudiantes que participaron en el encuentro se determinó de acuerdo con un límite establecido por el Codicen. Según contó, el mediodía del martes 30 de agosto los llamaron telefónicamente desde el Codicen para tener una reunión al día siguiente, pero era “imposible hacerla en esos plazos” y, por tanto, se coordinó para ayer de tarde.
En la mesa de negociación, los voceros plantearon que uno de los ejes principales es la necesidad de que “aproximadamente 15% del estudiantado” pueda obtener becas estudiantiles, señaló Bustelo. Si bien dijo que el porcentaje “es muy poco” en relación a los estudiantes que lo necesitan, es, por lo pronto, “el mínimo” al que aspiran. Valessi dijo que este punto fue uno respecto de los cuales no obtuvieron respuesta y que “la responsabilidad se tira: cuando estamos en el Codicen se nos dice que son resoluciones del Consejo de Formación en Educación [CFE] y cuando estamos en el CFE se nos dice que es cosa del Codicen”.
Por otro lado, Bustelo explicó que plantearon que la reforma que implantará la ANEP en 2023 es “inconsulta con docentes y estudiantes” y, por lo tanto, reiteraron su pedido de que su aplicación se posponga hasta 2024. Según entienden, es necesaria una mayor discusión, porque se trata de un tema “importante y [que] lleva un montón de discusión y lectura”.
Al respecto, Silva señaló que el proceso de transformación educativa no va a parar; “podemos discutir, generar más instancias de participación, pero en 2023 el cambio en la formación de educadores va a comenzar”, destacó. Sobre la denuncia de falta de participación de docentes y estudiantes, Silva negó que esto suceda y subrayó que hay “muchos documentos y participación de docentes” y que, de hecho, los documentos de la reforma “los hacen equipos técnicos de docentes”.
En cuanto al contenido de la reforma, Bustelo especificó que la consideran “privatizadora”, porque “fomenta que las personas elijan la educación privada por encima de la pública”. En otro orden, la vocera del Ceipa dijo que también “apunta a que los profesores nos enfoquemos en las competencias, en lo técnico y específico de cada materia”, lo que es “bastante grave en cuanto a la formación de las personas y deja bastante afuera el poder progresar”.
Con respecto a este punto, Silva manifestó que se trata de una “falsa oposición”, porque “para que puedan tener competencias y desarrollarlas, las personas necesitan contenidos, que están en las distintas disciplinas”.
Bustelo admitió, a su vez, que no es que defienden “a capa y espada” el actual plan de estudios, ya que “tiene un montón de cosas que están mal”. Sin embargo, los estudiantes de formación en educación entienden que la reforma tal y como está planteada “lo empeora muchísimo más”.