La Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) difundió un informe realizado en conjunto por su Secretaría de Presupuesto y la cooperativa de economistas Comuna, en el que analizan el presupuesto educativo a partir de los datos entregados por el gobierno en la Rendición de Cuentas de este año. El informe analiza la asignación y la ejecución de recursos en el sector, con foco en la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), en función de los documentos que el organismo presentó hace semanas al Parlamento nacional.
El estudio va en la misma línea de las estimaciones que Fenapes viene haciendo sobre que existe un recorte presupuestal en la educación pública. Los datos de 2022 analizados dan cuenta de que los recursos de la educación han disminuido, tanto en relación con el producto interno bruto (PIB) como en términos reales, si se lo compara con la misma ANEP y teniendo en cuenta la inflación.
Según se muestra, el presupuesto de toda el área educativa ascendió en 2022 a 131.577 millones de pesos, pero incluye a diversas instituciones que realizan acciones en ese sentido. Además de la ANEP, que representa 69% de los recursos, la Universidad de la República (Udelar) (16,67%) y la Universidad Tecnológica (1,03%), entran también el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, el Ministerio de Educación y Cultura y Presidencia de la República, entre otros. En total, el informe señala que el presupuesto destinado a la educación el año pasado representó 4,52% del PIB, porcentaje que, según se muestra, es el más bajo desde 2017.
Si se analiza específicamente el presupuesto de la ANEP, este representó 3,1% del PIB, la misma cifra que en los últimos dos años y en 2017. Entre ese año y 2020 la representación del presupuesto del organismo había ido en aumento, aunque se aclara que en 2020 eso se explica por la caída del PIB uruguayo. En el caso de la Udelar, en cambio, el presupuesto equivale a 0,8% del PIB, participación que permanece prácticamente incambiada desde 2009.
La asignación presupuestal que recibió el organismo se analiza en función del acumulado desde 2019 y, pese a una recuperación de casi 900 millones de pesos el año pasado, en los últimos tres años la ANEP lleva perdidos más de 2.400 millones de pesos, que equivalen a 59 millones de dólares. No obstante, al analizar la ejecución de esos recursos el estudio encontró un recorte mayor para el organismo, que equivale a 95 millones de dólares. Si se analiza el presupuesto dentro de la ANEP, las dependencias más perjudicadas fueron la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP) y la Dirección General de Educación Secundaria (DGES).
Fenapes y Comuna concluyen que, a precios constantes de 2022, desde 2019 la ANEP perdió 3% de su presupuesto. Según se detalla, ello no sólo se explica por una menor asignación presupuestal, sino también por “una tendencia a la subejecución”, algo que no sólo se apreció en el organismo, sino en todo el Estado.
El estudio también hace una comparación del presupuesto ejecutado a precios constantes entre 2021 y 2022. En total, hubo un incremento de 1,25%, con un aumento más marcado de las inversiones, de 14,16%, pero con una caída en los montos ejecutados en ese rubro por la DGEIP y la DGES. En materia salarial, si bien aumentó el presupuesto de la ANEP para ese fin, se da cuenta de que se registró una caída de 0,32% en los recursos destinados a salarios en términos reales.
Por su parte, se realiza un análisis del pedido presupuestal del organismo ante el Parlamento y se concluye que 60% de los incrementos son pedidos para la aplicación de la transformación curricular. En particular, se muestra que una parte importante del dinero que se pide para ese fin en la educación obligatoria se dirige a la organización de encuentros de docentes y para el pago a mentores, un rol clave para la implementación en la educación media.
El informe de Comuna y Fenapes también muestra que en 2022 la educación privada fue exonerada del pago de 5.650 millones de pesos en impuestos, un monto que es casi el doble de lo que pidió la ANEP al Parlamento.
Diferencias
En diálogo con la diaria, Emiliano Mandacen, secretario general de Fenapes, consideró que el informe le da la razón al sindicato, que desde hace tiempo sostiene que existe un recorte presupuestal en la educación. En particular, señaló que el sindicato discrepa con el destino de los recursos incrementales que la ANEP pidió en la Rendición de Cuentas, porque entienden que no ataca las principales necesidades del sistema.
Desde Fenapes entienden que, en el caso de la educación media, los recursos deberían dirigirse prioritariamente a la mejora de aprendizajes de los estudiantes, con el diseño de un potente plan de acompañamiento de los adolescentes. Según detalló Mandacen, además de apoyos académicos, dicho plan debería incluir recursos para alimentación y boletos, que en algunos departamentos del interior son un problema para que muchos estudiantes concurran al liceo. Además, dijo que debería destinarse más presupuesto a la infraestructura, a la atención de inequidades salariales dentro del sistema y a disminuir el tamaño de grupos, donde existe una “tendencia al alza” en los últimos años, según manifestó.
En suma, destacó que el informe muestra una “subfacturación” dentro de la ANEP que hizo que el organismo ahorrara 45 millones de dólares, y aseguró que ese fue uno de los elementos que generaron molestia en el consejero Juan Gabito, quien pidió licencia a su cargo durante más de un mes y evalúa renunciar. Como ejemplo de recursos que no han sido ejecutados y son importantes para el sistema educativo, Mandacen mencionó la contratación de 60 psicólogos para Secundaria, algo que las autoridades políticas han anunciado desde hace meses, pero aún no se ha concretado. “Hay entre 45 y 50 millones de dólares que están amorralados y no se sabe a dónde van”, resumió el integrante de Fenapes.
Por su parte, Mandacen lamentó que ahora el gobierno “ataque” a la ANEP con cambios en el sistema de certificaciones médicas, luego de que la semana pasada la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, anunciara en una entrevista a Carve que se preparan cambios en esa área. Según la jerarca, el organismo destina “más de 100 millones de dólares” para ese rubro, lo que consideró elevado, y planteó que hay docentes que se certifican en el sector público pero siguen trabajando en el privado.
El secretario de Fenapes manifestó su rechazo a ese planteo y reclamó que se estudien los motivos por los que los docentes tienen que certificarse. En ese sentido, apuntó que en gran medida eso tiene que ver con las condiciones laborales a las que se enfrentan a diario en los centros educativos. Según consideró, cualquier cambio que quiera introducirse en esa área en la ANEP deberá ser objeto de negociación colectiva y no puede definirse por un decreto del gobierno nacional, ya que se trata de un ente autónomo.