Con las autoridades de la educación designadas y oficializadas con sus actos de asunción, la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Senadores recibió por primera vez en el nuevo gobierno frenteamplista a una delegación del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y al Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
En el orden del día fueron varios los temas planteados: los días efectivos de clase del año lectivo en educación inicial, primaria y media, a partir de un proyecto presentado por el colorado Pedro Bordaberry, la Universidad de la Educación, y la situación de algunos centros educativos de Paysandú.
En ese marco, uno de los principales anuncios lo dio el ministro de Educación y Cultura, José Carlos Mahía, quien en rueda de prensa ratificó el compromiso programático de “llevar adelante una Universidad de la Educación” y, por tanto, de presentar la iniciativa al Parlamento.
Con el fin de que la propuesta obtenga las mayorías especiales necesarias para ser aprobada, Mahía señaló que si bien desde el Frente Amplio (FA) han suscrito la idea de que la universidad sea creada con cogobierno y autonomía, también están “dispuestos a dialogar para llegar a acuerdos”. Señaló, específicamente, que cuando envíen el proyecto de ley “va a haber un diálogo específico para intentar buscar acuerdos”.
Según el ministro, la reunión fue “muy positiva”, ya que hubo “una disposición de buena voluntad por parte de la oposición respecto a generar una nueva universidad, en este caso de la educación”. “Me voy más esperanzado de lo que entré cuando vine, porque parece haber condiciones para avanzar en algo que Uruguay se debe”, manifestó Mahía.
Por otra parte, aseguró que también mantendrán diálogo con los actores educativos. En ese sentido, fue consultado por la prensa sobre la aceptación entre los docentes de que la Universidad de la Educación se cree, pero sin cogobierno: “Yo no dije que no iba a haber silla para ellos, dije que estamos dispuestos a construir una Universidad de la Educación que tenga una gobernanza acordada, y me permito decir que no creo que los partidos de la oposición quieran que estén afuera los estudiantes o los docentes. Creo que tenemos que buscar un acuerd, y la fórmula de ese acuerdo vamos a transitarla”.
Según supo la diaria, en la reunión varios legisladores de la oposición plantearon reparos sobre la posibilidad de replicar un cogobierno como el de la Universidad de la República (Udelar), pero se mostraron abiertos a la posibilidad de que docentes y estudiantes estén incluidos en la gobernanza del nuevo organismo, como ya ocurre con el actual Consejo de Formación en Educación.
Bianchi: “No vamos a votar un proyecto que sea similar o igual”
Graciela Bianchi, senadora del Partido Nacional (PN) e integrante de la Comisión de Educación y Cultura, destacó, al igual que Mahía, que hubo un “muy buen clima de trabajo” en la sesión, con un “muy buen talante de todas las autoridades”.
Por otra parte, señaló que tanto la Universidad de la Educación como el proyecto de Bordaberry son dos temas “de largo aliento”. Aun así, al respecto de la nueva universidad, reiteró que existe desde el PN “un parteaguas”, que es el cogobierno. “No vamos a votar un proyecto que sea similar o igual” al ya presentado por el FA en gobiernos anteriores, sentenció. En base a la experiencia de la Udelar, la senadora aseguró que “el cogobierno no funciona; debe ser el único caso en el mundo en que los estudiantes mandan más que los rectores y los decanos”, dijo.
De todas formas, Bianchi resaltó que “lo que importa es la calidad de la educación” y, a pesar de que también es importante “la forma jurídica”, a la oposición le interesa que “el nivel sea universitario”. De acuerdo a la senadora, se trata de una situación que “desgraciadamente se ha mantenido en decadencia durante mucho tiempo”.
Por otro lado, en cuanto a la propuesta de extender los días lectivos a mínimo 200, la senadora esgrimió que “no es un problema solamente de los días”, sino “de la calidad de la educación”. Bianchi consideró que el problema es “fundamentalmente pedagógico”, pero también de “interrelacionamiento de los distintos organismos del Estado”.
Sobre las inasistencias, por tanto, para Bianchi el reglamento “no puede permitir más de 20 faltas”, y en ese sentido esbozó su desacuerdo con la flexibilización de las asistencias implementada por el gobierno anterior con la transformación educativa. “Si encima, a través de la reglamentación, les decimos ‘no te preocupes, porque igual pasás’, estamos dando una señal equivocada”, manifestó.
Sabini: “Los docentes y los estudiantes seguramente van a estar representados”
Sebastián Sabini, senador del FA e integrante de la comisión, coincidió en que el punto de mayor cuestionamiento de la oposición a la nueva universidad es el cogobierno.
De acuerdo al senador, “los docentes y los estudiantes seguramente van a estar representados”: “Hay que ver si logramos toda la representatividad que nosotros queremos o si ponemos como primer objetivo la creación institucional y que más adelante se avance hacia un cogobierno pleno”, esgrimió. Asimismo, manifestó que el proyecto de la Universidad de la Educación será “una de las prioridades de la bancada en materia de educación”.
Por otro lado, en cuanto a la propuesta de Bordaberry, Sabini señaló que desde el FA tienen “dudas de la constitucionalidad”, debido a que la ANEP es un ente autónomo de educación y, por tanto, la Constitución “no permite que los legisladores” digan “cómo se tienen que hacer las políticas educativas”. “Podemos establecer objetivos, podemos establecer el qué, pero no el cómo”, agregó.
Aun así, resaltó que el FA también tiene la intención de que “los estudiantes tengan más tiempo pedagógico”, algo que “se puede medir en días o se puede medir en horas”, por lo que se deberá evaluar si profundizarán el objetivo con este proyecto u otro “más abarcativo”.
ANEP prepara medidas para mejorar asistencia a centros educativos
Pablo Caggiani, presidente de la ANEP, en rueda de prensa se refirió concretamente al proyecto de ley presentado por Bordaberry para extender los días lectivos de todos los subsistemas a un mínimo de 200. De acuerdo al jerarca, la propuesta tiene características similares a la del FA de extender el tiempo pedagógico, en cuanto a la necesidad de acceder a cuidados, mayor tiempo de educación, entre otros puntos.
Aun así, resaltó que si bien considera “viable” la propuesta de Bordaberry en términos de días y horas, aseguró que hoy ya hay estudiantes que cumplen con el mínimo de 200 días lectivos, como los que asisten al Verano Educativo o Febrero en Acción. Además, señaló que es necesario evaluar la iniciativa en su “complejidad” y que, para eso, “tiene que tener un componente más técnico de implementación que le corresponde al Codicen”.
Con relación a esta temática, Caggiani enfatizó en que uno de los principales temas planteados por la ANEP en la comisión fue el problema de la inasistencia. “Se puede pensar en más horas y más días de clase, pero si los gurises no están, no hay milagro”, manifestó.
En ese marco, aseguró que en estos días desde la ANEP anunciarán “una batería de medidas” para atacar la inasistencia de los estudiantes, y apuntó que el MEC ya anunció que hará “una campaña de bien público” que acompañará la estrategia de la ANEP.