El candidato a la presidencia del Frente Amplio (FA), Yamandú Orsi, tuvo una reunión este martes en La Huella de Seregni con su comando de campaña y el Secretariado Ejecutivo de la fuerza política, dos días después de las elecciones nacionales, en las que el FA alcanzó 43,9% de los votos. De cara a la segunda vuelta del 24 de noviembre, el FA se plantea como objetivo recorrer el país y comenzará el domingo con un “Ramblazo por Uruguay”, en Montevideo, con el fin de lograr, por lo menos, 40.000 votos más que le den la seguridad de ganar el gobierno.

El senador del Frente Amplio y coordinador del comando de campaña de la fórmula, Alejandro Sánchez, dijo en rueda de prensa que la fuerza política hace una evaluación “positiva” de las elecciones del domingo, debido a que “recuperó el interior” y logró ser el “partido político más votado de Uruguay”. “Hemos tenido un buen resultado. El Frente Amplio ha salido primera fuerza política en 12 departamentos, de los cuales diez son fuera del área metropolitana”, apuntó.

Ante esa evaluación, el FA definió un plan de movilización para llevar adelante durante este mes. El detalle del plan se conocerá en los próximos días, pero Sánchez adelantó que comenzará este domingo con un “Ramblazo por Uruguay”, en el que la fórmula del FA dará un discurso en la rambla de Montevideo. Después de eso, iniciará una gira por el interior del país, priorizando aquellos lugares en donde se puedan sumar votos.

El FA maneja que su piso para las elecciones de noviembre es casi 44% de votos que logró en octubre. Para poder ganar la elección y llegar al gobierno, evalúan que necesitarán entre 40.000 y 50.000 votos más, en el entendido de que son votos que se les restarán a los partidos de la coalición de gobierno. Entienden que Álvaro Delgado, el candidato del Partido Nacional (PN), no logrará “acarrear” a todos los votantes de la coalición.

“Los ciudadanos fueron convocados a elegir a distintos partidos políticos. Eligieron y se conformó el Parlamento. Ahora lo que debemos convocar es a todos los ciudadanos, en todos los territorios y departamentos, a elegir quién puede conducir el barco. Creemos que Yamandú tiene sobradas condiciones, no sólo porque tiene la mayoría en una cámara [de Senadores], sino porque ha demostrado capacidad de negociación, de diálogo en su departamento. Eso nos parece que es importante a la hora de pensar cómo va a conducirse el país en el futuro”, añadió Sánchez.

Según supo la diaria, en el Secretariado se presentaron algunos datos que marcan que el FA inicia la carrera por la segunda vuelta como favorito. Agustín Canzani, sociólogo y director de la Fundación Liber Seregni, la escuela de formación frenteamplista, presentó un informe con un escenario “muy positivo” de cara al balotaje.

Fuentes políticas señalaron a este medio que el informe de Canzani, que había sido “escéptico” en 2019, plantea que la fórmula del FA tiene una diferencia a favor de entre 5% y 6% de intención de voto sobre la dupla Delgado-Ripoll. Informalmente, dirigentes frenteamplistas señalan que, así como sucedió en 2019, cuando los partidos de la coalición no pudieron retener en noviembre a 5% del electorado que los votó en octubre, en esta campaña se puede dar algo similar. A eso le suman el posible apoyo de personas que votaron en blanco o anulado, pero, principalmente, de aquellos que votaron por el Sí al plebiscito de la seguridad social, pero que no votaron a ningún partido. Esos votantes, “si uno hace una lectura rápida”, son de “izquierda”, comentó una fuente a la diaria.

Este optimismo, la evaluación “positiva” que hace el FA y los datos aportados este martes en el Secretariado se distancian de la percepción que tuvieron algunos dirigentes frenteamplistas el domingo por la noche apenas se conocieron las primeras proyecciones. En ese momento, algunos dirigentes entrevistados en el hotel NH reconocieron que se trataba de una votación que estaba por debajo de la expectativa y que hacía recordar a la elección de 2019.

En la reunión de este martes también participaron aquellos dirigentes que encabezaron las listas electas el domingo, y que a partir de esta semana se sumarán al comando de campaña frenteamplista. Según dijo Sánchez, desde el domingo hay una “nueva realidad”, en tanto se conformó el Parlamento y ahora los sectores se podrán “sumar con mucha más fuerza a la campaña”. “Van a estar más empapados y por dentro de la campaña. Esa fue la idea de por qué Yamandú los convocó, para tener un ámbito de discusión, de trabajo. Lo tuvieron antes, pasa que las dinámicas cambian”, especificó.

El debate Orsi-Delgado y la posibilidad de un debate Cosse-Ripoll

Sánchez contó que la Corte Electoral se contactó con el equipo de campaña del FA para convocarlos a una primera reunión, que será este jueves, junto al comando de campaña del PN. Allí se definirán los temas, la lógica y la fecha del debate entre los candidatos, que es obligatorio por ley desde 2019.

Consultado sobre la posibilidad de que haya un debate entre las candidatas a la vicepresidencia, Carolina Cosse (FA) y Valeria Ripoll (PN), el legislador dijo que ese tema “no se ha evaluado”. “Acá se ha discutido mucho de si Yamandú tenía que debatir. Bueno, ahora Yamandú va a debatir. Ahora se les ocurren otros debates, pero los evaluaremos en su momento. Lo que va a suceder es que la coalición resolvió su interna, aunque no sé todavía si es una coalición o un cogobierno, y los vamos a enfrentar en octubre”, dijo Sánchez.

Sobre el resultado del plebiscito de la seguridad social, que fracasó con casi 40% de los votos, el senador dijo que “evidentemente” se tendrá que escuchar a la ciudadanía. “Nosotros hemos planteado desde el día uno que queremos ser gobierno y convocar a un diálogo social para cambiar aspectos muy negativos de la ley de seguridad social de este gobierno”, sintetizó.