La precandidata del Frente Amplio (FA) Carolina Cosse presentó este martes la segunda y última parte de su “Plan País”, que es complementario a las bases programáticas del FA. Esta vez, la intendenta de Montevideo eligió mostrar y explicar sus propuestas, centradas en la “sostenibilidad económica, social y ambiental”, en el gimnasio Buem, en la ciudad de Durazno, a 180 kilómetros de distancia del teatro El Galpón, donde un mes atrás presentó la primera parte de su plan, con medidas para implementar en el corto plazo.
“Estamos palpitando con las y los militantes del interior”, exclamó Cosse al comienzo del evento ante la militancia frenteamplista que llenó el gimnasio duraznense. De entrada, la precandidata puntualizó que el Plan País es producto del “estudio de nuestro programa único del Frente Amplio”, el cual “lo hemos cruzado con la realidad” porque, sostuvo, Uruguay “necesita un conjunto de acciones concretas para el desarrollo y el crecimiento con distribución”.
Dicho esto, Cosse empezó a enumerar las propuestas que forman parte de la segunda parte de su Plan País, entre las que plantea crear una nueva institucionalidad para desarrollar “una verdadera estrategia de riego a nivel nacional”. En el documento elaborado por el equipo técnico de Cosse, al que tuvo acceso la diaria, se sostiene que, para crecer económicamente, Uruguay “debe producir más”, pero “en forma sostenible y atendiendo a las dificultades que plantea el cambio climático”. Para ello, “el riego se concreta como la alternativa”.
Lo que se propone es crear un instituto encargado de “planificar, diseñar y gestionar una estrategia nacional de riego y sus obras asociadas”, las cuales se planificarán a nivel de cuencas. También “se restringirá la implantación de cultivos en planicies inundables y zonas riparias”.
“Un shock de infraestructura”
En el apartado sobre empresas públicas, se propone que OSE encabece la construcción de la reserva de Casupá y que Ancap lidere “el proceso de hidrógeno verde como ejecutor de una política de desarrollo país”. Se señala que Ancap se convertirá en “una empresa de energía”, superando “el modelo tradicional de empresa de petróleo y derivados”; asimismo se establece como meta que 20% de las inversiones de Ancap sean en energía sostenible.
Por otra parte, en el documento se incluyó, dentro de la categoría de “imprescindible”, realizar “un shock de infraestructura”, que tendrá un presupuesto de “entre tres y cinco puntos del PIB [Producto Interno Bruto], más allá del presupuesto nacional”. “Este shock tendrá como elementos fundamentales la elaboración de un plan, la constitución de un fondo y el desarrollo de una estrategia participativa”, y entre sus cometidos estará “mejorar la competitividad y apuntalar el crecimiento económico” y “realizar mejoras en la infraestructura social para una mejor calidad de vida de los uruguayos y uruguayas”.
Al final del evento, después de las intervenciones de una decena de técnicos, Cosse subrayó que sus propuestas pretenden “profundizar en la adhesión al programa del FA”, y afirmó que “no ha sido con promesas que durante 15 años el FA transformó al Uruguay, [sino que] ha sido con propuestas”.
Fortalecer el Sistema de Cuidados
“No hay desarrollo sin cuidados”, aseveró Cosse en la presentación. En este apartado del documento se propone garantizar el cumplimiento de la ley del Sistema Nacional Integrado de Cuidados, porque “no hay desarrollo productivo inclusivo sin un sistema de cuidados fortalecido, con perspectiva de género y con financiamiento que permita el sostenimiento de la política pública en el tiempo”.
Asimismo, se propone la creación de centros de cuidados para menores que estén a cargo de personas que asisten a trabajar o estudiar a la Udelar, la UTEC, formación docente de ANEP y “centros de estudios de educación extraedad y liceos con planes para terminación de la trayectoria educativa para jóvenes y adultos”. Se propone, además, ampliar el número de escuelas de tiempo completo a nivel nacional.
Por otra parte, se plantea realizar un nuevo diseño del sistema de licencias parentales, en pos de “propiciar y estimular la conciliación de la vida familiar y laboral con corresponsabilidad de género”.
Apoyo a las mipymes
Cosse también anunció “un conjunto de medidas concretas” para las micro, pequeñas y medianas empresas que, según se señala en el documento, constituyen 99,6% del tejido empresarial y generan 65% de los puestos de trabajo, por lo que “se vuelve fundamental avanzar en un plan integral para estimular su desarrollo y consolidación”.
En primer lugar, se plantea la reducción de “costos y cargas burocráticas”, por ejemplo, a través de la implementación de “una solución de facturación electrónica gratuita” a cargo de la Dirección General Impositiva, así como también mediante la exoneración de “la obligación de llevar registros y libros contables”.
En segundo lugar, se propone fortalecer el Fondo Industrial, “cuadruplicando” su presupuesto en el primer año de gestión y otorgando “incrementos sostenidos durante todo el período”. También se propone modificar la ley de inversiones, “computando como inversiones elegibles a aquellas que generen saltos tecnológicos con foco en la mejora de la productividad y el desarrollo de nuevos productos, y generación de mano de obra de calidad”.
Por último, con relación a “los emprendimientos privados de gran porte”, se propone establecer como requisito “la conformación de un fideicomiso” en el cual se gestionen fondos públicos y privados con el propósito de “desarrollar la cadena de proveedores nacionales del emprendimiento, tanto para la fase de construcción como para la fase de operación y mantenimiento”. Se sostiene, en definitiva, que “las grandes inversiones deben generar trabajo nacional”.
En materia de política salarial, el equipo técnico de la precandidata del FA plantea modernizar los Consejos de Salarios, que actualmente tienen “los mismos grupos de negociación que en el 2005”, así como retomar los “aumentos diferenciales para salarios sumergidos”, sobre todo para “los trabajadores de los sectores afectados por la pandemia”. En cuanto a las pasividades, se expresa el compromiso de aumentar especialmente las pasividades que sean inferiores al Salario Mínimo Nacional.
Fondo de estabilización para los combustibles
Con el rumbo en “la sostenibilidad económica, ambiental y social”, Cosse adelantó que en su Plan País hay “una gran cantidad de medidas” con relación a “temas de energía, empresas públicas, infraestructura y demás”. En concreto, se propone “desarrollar la cadena completa del hidrógeno verde a escala industrial”, para lo cual se prevé fortalecer “el rol de las empresas públicas como dinamizadores del sector”.
Asimismo, el equipo técnico de Cosse entendió que es posible reducir en 30% el uso de combustibles fósiles en el transporte. Para esto, entre otras cosas, se propone cuadruplicar la cantidad de ómnibus eléctricos de transporte de pasajeros de corta distancia, así como también duplicar el parque automotor eléctrico.
También se propone la creación de “un fondo de estabilización” para los precios de los combustibles líquidos, que actualmente varían mes a mes. El objetivo del fondo será “cubrir la volatilidad de los precios internacionales de los energéticos asociados al petróleo, aportando estabilidad de precio en un horizonte temporal mínimo de seis meses”.