La División Asesoría para la Igualdad de Género de la Intendencia de Montevideo (IM) tiene la misión de coordinar acciones que apunten a disminuir las brechas de género, en el marco de las políticas llevadas adelante por el gobierno departamental. En las últimas dos décadas, la comuna ha elaborado tres planes para la igualdad de género que oficiaron como hojas de ruta para guiar esas acciones. Las metas propuestas en el tercero, que abarcó el período 2014-2020, fueron cumplidas en 70%, según la evaluación presentada en setiembre del año pasado. Ahora, la división asegura renovar el compromiso y trabaja en la construcción de una nueva estrategia para 2021-2025.

En un conversatorio público virtual que invitó al intercambio para “fortalecer las políticas de género” en Montevideo, la división presentó los principales lineamientos que orientarán el plan de este quinquenio. La estrategia girará en torno a cuatro ejes: una vida libre de violencia, empoderamiento y autonomía económica de las mujeres, derecho a la ciudad y cultura organizacional con igualdad de género. Incluirá tres miradas transversales: participación, territorio e interseccionalidad. Respecto del último punto, el objetivo es “pegar un salto” hacia una “mirada interseccional más integral”, que vaya más allá del abordaje de las situaciones y las poblaciones concretas, explicó la directora de la Asesoría para la Igualdad de Género de la IM, Solana Quesada, a la diaria.

Durante el conversatorio, representantes de organizaciones feministas y de grupos de mujeres plantearon sus inquietudes y propusieron algunas cuestiones que, a su entender, deberían ser tenidas en cuenta en la construcción de la próxima estrategia. En ese sentido, Quesada contó que hubo pedidos para que se siga profundizando el acompañamiento a mujeres que vivieron situaciones de violencia sexual y “la igualdad de género en los espacios culturales y las expresiones artísticas” en Montevideo, entre otros temas.

La idea es trabajar en la elaboración de la estrategia de acá a fin de año y presentarla en marzo de 2022, durante el mes de las mujeres, explicó Quesada.

La jerarca informó que este año, mediante el Plan de Apoyo Básico a la Ciudadanía (ABC), impulsado por la administración de la intendenta Carolina Cosse para hacerle frente a la emergencia sanitaria, la IM aumentó 77% el presupuesto de la Asesoría para la Igualdad de Género respecto de 2020. La mayor parte de ese aumento, señaló, está destinado a fortalecer los programas de atención a mujeres que viven situaciones de violencia de género.

Por otra parte, dijo que es la primera vez que la Asesoría para la Igualdad de Género forma parte del gabinete desde el inicio de una administración, lo que permitió que las temáticas de género fueran un “eje transversal en toda la planificación y el presupuesto quinquenal” de la IM.

Empoderamiento y autonomía económica

Uno de los principales ejes del nuevo plan será la autonomía económica de las mujeres, un tema que la asesoría considera “prioritario”, junto con la lucha contra la violencia de género. La directora mencionó algunas de las iniciativas que promueve la división en esta línea, como el trabajo que realiza con las mujeres en los barrios de Montevideo y la promoción del Fondo Fortalecidas, que desde 2017 apoya proyectos de grupos de mujeres “para poder hacer actividades que les permitan trabajar lo colectivo, salir de su casa y participar en espacios de empoderamiento”. Desde 2017, 161 grupos presentaron sus propuestas para Fortalecidas y 138 participaron en talleres de capacitación, según datos de la IM. Un total de 65 iniciativas fueron aprobadas, incluidos los 17 proyectos premiados en la última edición 2020-2021.

Otra línea de trabajo en la materia será “todo lo que hace al reconocimiento de las mujeres en el territorio y a nivel de la ciudad”, dando continuidad a propuestas como el reconocimiento de las Ciudadanas Ilustres, “para poner en valor el aporte de las mujeres a Montevideo”. También continuarán las actividades que se llevan adelante en la Casa de las Ciudadanas, en donde actualmente funcionan “un taller de huerta, espacios de capacitación para equipos técnicos, un espacio para mujeres emprendedoras y un proceso de certificación y terminación de la educación primaria y secundaria para aquellas mujeres que no lo han hecho”, entre otras cosas, dijo Quesada.

A la vez, hay una línea de trabajo que incluye el fortalecimiento de “grupos de mujeres con mirada interseccional”, como las trabajadoras sexuales (cis y trans), las mujeres privadas de libertad, las mujeres afro, las migrantes o las que se encuentran en situación de discapacidad.

Por otra parte, en el marco del Plan ABC y en conjunto con el Departamento de Desarrollo Económico de la IM, se promoverán iniciativas para la autonomía económica por medio de dos nuevos fondos que apoyarán emprendimientos productivos liderados por mujeres. Se trata del plan Fortalecidas Crece –que brindará asistencia para capital de giro, refinanciación e inversión para unidades productivas de bienes y servicios que ya existen– y el Fortalecidas Emprende –que buscará contribuir al fortalecimiento de unidades productivas no formalizadas mediante capacitaciones, asistencia técnica y subsidios no reembolsables–.

El eje de empoderamiento abarca además la línea de masculinidades, con el programa Hombres Construyendo Igualdad. En este punto, Quesada recordó que la comuna también coordina un programa de atención a varones que deciden dejar de ejercer violencia, pero que esta otra iniciativa apunta a “seguir profundizando en el cambio cultural de cómo necesitamos que los hombres se transformen en esta construcción del ser varón para poder avanzar en la igualdad de género”, más allá de los agresores. “Es más una propuesta de talleres de sensibilización y de pensarse ellos como varones, sean funcionarios [de la IM] o varones de la ciudadanía”, señaló.

Libres de violencia

El otro eje principal de la nueva estrategia abarcará las acciones contra la violencia de género en Montevideo. Este año, en el marco del Plan ABC, la IM ha tomado distintas medidas para fortalecer sobre todo la atención a las mujeres en situaciones de violencia de género. En ese sentido, se aumentaron las horas de atención de las 12 Comuna Mujer que funcionan actualmente y se crearon dos servicios nuevos en los municipios C y CH, con lo que se completó la cobertura a nivel departamental. Al mismo tiempo, se modificó el funcionamiento para que se atiendan todas las situaciones de violencia de género comprendidas en el marco de la Ley 19.580 y no sólo las de violencia doméstica, como sucedía hasta el momento. También quedó habilitado un nuevo servicio de atención presencial que funciona los 365 días del año de forma complementaria a la asistencia que brindan las Comuna Mujer, y está previsto que este mes se inaugure un servicio especializado para mujeres en situación de discapacidad, junto con la Facultad de Psicología de la Universidad de la República, confirmó Quesada.

En paralelo a estas medidas, la idea es poder desarrollar un eje “más centrado en la prevención”, adelantó la funcionaria, “porque para dar respuesta a la violencia no sólo es necesario mejorar los servicios, sino que además se necesita poder trabajar en una estrategia territorial, cercana a las mujeres en los barrios”. Por esa razón, una primera medida será aumentar la presencia de referentes territoriales: hoy en día brindan asesoramiento en cinco municipios y la idea es que sean siete en 2022.

Además, Quesada dijo que la comuna desarrollará un “programa de agentes comunitarias para la prevención de la violencia de género”, que buscará capacitar a vecinas en los barrios “para que puedan tener herramientas en este tema, estar cerca de las mujeres cuando atraviesan estas situaciones y poder tener la información”.

En el entendido de que todas las áreas de la IM tienen que generar “compromisos” y “líneas de trabajo” para combatir la violencia de género, en este quinquenio se elaborará un plan departamental que además de incluir el abordaje de la violencia doméstica, también abarcará el acoso sexual en el espacio público y otras formas de violencia sexual como la trata y la explotación sexual. También habrá un énfasis en la articulación de género y generaciones, que comenzará con una “experiencia piloto” en la Comuna 13 de atención a niñas, niños y adolescentes hijos de las mujeres que se atienden allí por situaciones de violencia. A esto se suma el trabajo con la División Salud para la creación de referentes que trabajen la violencia de género en las policlínicas de la IM, y con Cultura para abordar el tema en el Carnaval y otros ámbitos artísticos.