El enfrentamiento entre policías y vecinos de Malvín Norte, que tuvo como saldo dos vecinas heridas por munición no letal disparada por los agentes, generó preocupación en la interna del gobierno. Las autoridades temen que, en caso de que ocurra un episodio similar en el barrio, uno o más perdigones terminen en Malvín Sur. “Nosotros confiamos plenamente en la puntería de nuestros agentes. Si le disparan a alguien de un cante, le van a pegar. Sobre todo porque les disparan muy de cerca. Pero hay que tener en cuenta que en el caso de los perdigones, por su propia naturaleza, el riesgo de que algún proyectil se pierda y termine impactando en un lugar diferente del planeado es muy alto. En Malvín Sur hay niños jugando en las calles, niños que no son delincuentes ni nada de eso, sino que son decentes”, explicó una fuente del Ministerio del Interior (MI). “Debemos combatir a los pichis pero sin poner en riesgo a la gente trabajadora que está al otro lado de Avenida Italia”, sintetizó la fuente consultada.

Una de las alternativas que maneja el MI es que los policías que vayan a ese barrio solamente disparen hacia el norte. “En realidad no sabemos muy bien qué hay al norte de Malvín Norte, pero supongo que debe de haber algún barrio más o menos parecido, así que sería una maniobra segura. Y para hacerla más segura aún tampoco se va a disparar para el este o para el oeste, porque ahí aumenta el riesgo de que haya alguna tragedia”.