La decisión de la bancada montevideana de ediles del Partido Nacional de iniciarle un juicio político a la intendenta Carolina Cosse fue definida por varios analistas como un paso en falso y también recibió críticas desde el interior del propio partido. Según fuentes del Honorable Directorio nacionalista, el organismo decidió sancionar a los curules. “Que se hayan mandado esta macana justamente ahora le hace mucho mal al partido. Por eso los vamos a sancionar con tres períodos sin poder salir de la Junta Departamental. Esto quiere decir que durante ese tiempo no van a poder presentarse como candidatos a senadores o diputados, ni ocupar cargos de confianza ni cargos diplomáticos. Sabemos que es un castigo muy severo, pero creemos que es necesario para que este tipo de arrebatos contraproducentes no se vuelvan a repetir”. Inicialmente algunos integrantes del directorio se mostraron contrarios a la sanción, ya que estar en la Junta Departamental es visto como una especie de “muerte política en vida”, aunque luego admitieron que la falta cometida ameritaba una sanción ejemplarizante.

La cifra: 300. Son los latigazos que hubiera recibido cada edil nacionalista si estuviéramos en una monarquía medieval.