Como siempre ocurre, la cercanía de un Mundial de fútbol está generando cambios en los hábitos de los consumidores. En esta ocasión, la fiebre por Qatar 2022 llegó incluso a la arquitectura, con el desarrollo de un nuevo sistema de construcción de viviendas. “Yo vivía en un monoambiente, así que ahí no podía instalar la tele gigante que me compré para ver a Uruguay en Qatar. De tanto medir paredes de casas para ver si me entraba la tele me di cuenta de que iba a ser más fácil construir una casa con cuatro teles de 200 pulgadas y un techo. Ahí no me iba a tener que preocupar más por si la tele iba a entrar bien o a pasar por la puerta”, contó el constructor de la primera vivienda con estas características.

Entre las ventajas que citan las personas que optan por este tipo de viviendas están la ausencia de molestos reflejos en la pantalla generados por ventanas, la posibilidad de ver varios partidos al mismo tiempo y la seguridad ante posibles robos, ya que los televisores tienen su base enterrada en el piso y por eso es prácticamente imposible que se los lleven los ladrones.

El proyecto: “Ahora los partidos son de mañana, pero para el próximo Mundial me voy a armar una barbacoa con dos teles para ver a Uruguay con la barra”. Fanático de la celeste y de la imagen electrónica.