El Ministerio de Relaciones Exteriores condenó el lanzamiento de un misil balístico intercontinental de prueba por parte de Corea del Norte. Fuentes de la cartera explicaron que la decisión “no se tomó de forma impulsiva ni como un simple reflejo de las condenas de otros países. La situación se analizó concienzudamente, sobre todo mediante la herramienta Google Maps, que nos permitió concluir que ese misil jamás podría llegar a Uruguay”. En efecto, el misil norcoreano tiene un alcance de aproximadamente 15.000 kilómetros, y la distancia entre Montevideo y Pyongyang es de casi 20.000. Las fuentes consultadas explicaron que si bien es “prácticamente imposible” que Pyongyang emprenda algún tipo de represalia militar contra Uruguay por la condena, el canciller Francisco Bustillo quiso “ponerse a cubierto”. “En la situación en la que está tiene que chequear una y mil veces cada paso que da. Cada vez que va a tomar una medida la analiza desde todos los ángulos posibles hasta estar convencido de que no existe ni la más remota posibilidad de que el presidente Luis Lacalle Pou se enoje y lo termine reprendiendo en público”.

El desafío: “Si Corea del Norte quiere dispararnos el misil, que lo haga, pero nosotros no nos vamos a callar”. Francisco Bustillo, futuro exministro de Relaciones Exteriores.