El senador cabildante Guillermo Domenech calificó ayer como “fascista” a un proyecto de ley que busca aumentar la presencia de mujeres en el Parlamento. Esto generó una airada respuesta por parte de los impulsores de la norma. Pero hace unas semanas se había dado una situación similar con otro dirigente y fue el propio partido el que reaccionó. “Las feministas que impulsan la ley de paridad son radicales, intolerantes y violentas. Me hacen acordar a la dictadura”, fueron las palabras que le costaron la expulsión al dirigente cabildante. Según relató un testigo de los hechos, “estábamos en una reunión de Cabildo diciendo que las feministas eran feminazis, fascistas y otras cosas horribles, cuando alguien las comparó con la última dictadura uruguaya. Ahí se hizo un silencio incómodo, porque nos costaba creer que alguien pudiese estar diciendo algo tan irrespetuoso”. El dirigente expulsado pidió disculpas por sus palabras, pero estas no fueron aceptadas. “A lo mejor dentro de 20 años esa frase es aceptable dentro de Cabildo Abierto, pero en estos momentos no, porque estamos hablando de temas demasiado recientes sobre los que es difícil aplicar una visión histórica”.
La frase: “No hay que olvidar que Mussolini fue un gran feminista”. Guillermo Domenech, autor del libro El fascismo, un mal erradicado.