Lanzada en 1998 y con el objetivo de mantenerse operativa durante 15 años, la Estación Espacial Internacional (EEI) se está deteriorando y necesita cada vez más reparaciones. La situación preocupa especialmente a los astronautas que se están preparando para viajar al espacio, quienes tomaron una medida de fuerza; no van a salir de la Tierra hasta que no quede “fehacientemente comprobado” que las últimas reparaciones están bien hechas. “No vamos a arriesgar nuestras vidas viajando a un vehículo que quizás no esté en buen estado. Hasta que el diputado uruguayo Gabriel Gianoli, que es nuestro perito designado, no viaje a la estación y compruebe con sus propios ojos si está en buen estado, nosotros no vamos a ir”, declaró un representante de los astronautas.

Los futuros habitantes de la EEI consideran que hay “demasiadas preguntas por responder”. “¿Las soldaduras están bien hechas? ¿La estación es del ancho de Broadway o de los Champs Elysées? ¿La altura es la de un edificio de tres, de cuatro o de cinco pisos? Son respuestas que sólo una inspección ocular in situ de un experto como Gianoli puede respondernos”, aseguró el astronauta.

Desde la NASA se mostraron dispuestos a aceptar que el legislador uruguayo viaje a hacer la inspección. “No estamos seguros de cuáles son sus calificaciones, pero si un país serio como Uruguay pone en sus manos una parte de su menguado presupuesto y la vida de cientos de marinos en sus manos, claramente tiene experiencia en peritajes”, explicó un vocero de la agencia.

Seguridad para todo el mundo: “La única manera de comprobar si el programa nuclear iraní tiene únicamente fines pacíficos es mediante una inspección del diputado uruguayo Gabriel Gianoli. Si no permiten su ingreso para investigar, tendremos que bombardear nuevamente”. Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos.