La jueza de Familia de 15° turno, Adriana de Azis, tomó declaración a siete testigos en la causa iniciada por la Asociación Autismo en Uruguay (AAU) en contra el Estado, en reclamo de que reactive el Sistema de Cuidados. La acción de amparo fue presentada contra el Ministerio de Desarrollo Social (Mides), el Banco de Previsión Social y la Administración Nacional de Educación Pública, debido a que los padres no pueden acceder a asistentes personales que les permitan inscribir a sus hijos en la escuela.

En la acción de amparo, los demandantes señalan que la paralización del Sistema de Cuidados “vulnera derechos fundamentales” de la población autista, “como el derecho a la educación, el derecho a la salud y el derecho a ser incluido en la comunidad”.

Además, los demandantes piden que se derogue el artículo 26 del Decreto 117/016, que creó franjas para establecer diferentes niveles de subsidio en función de los ingresos y que en todos los casos en que exista dependencia severa haya un 100% de financiación.

En diálogo con la diaria, el abogado que representa a la AAU, Juan Ceretta, dijo que durante la audiencia la directora de Cuidados del Ministerio de Desarrollo Social, Florencia Krall, dijo que el programa no está parado, debido a que continúan recibiendo solicitudes, lo que para Ceretta es una forma de admitir que no está prestando servicios.

“Por lo menos desde noviembre de 2019 no se asigna ningún asistente, todos los trámites están parados”, señaló Ceretta, quien explicó que las familias que tienen personas a cargo con trastorno del espectro autista (TEA) no pueden llevar a sus hijos a la escuela, porque no los aceptan sin un asistente.

Ceretta dijo que el principal argumento del Mides es que no se retomaron las entrevistas por la pandemia, cuando los funcionarios de la cartera hace meses que retomaron la presencialidad. “La pandemia es una excusa inadmisible, si no se pudiera por la pandemia, lo lógico sería sustituir el mecanismo”, señaló.

El abogado también rebatió el planteo de Krall en cuanto a la existencia de un protocolo para que la ANEP admita la inscripción de escolares con TEA, aún sin tener designado un asistente. Subrayó que los especialistas que declararon en la audiencia, entre ellos una neuropediatra, una psicóloga especializada en TEA y una psiquiatra infantil, señalaron que los niños no pueden asistir a una escuela sin estar acompañados.

En la próxima audiencia, que fue fijada para el miércoles, se tomará declaración a cinco padres de niños, niñas y adolescentes con TEA y una psicóloga. Luego, las partes presentarán sus alegatos finales.

En caso de que el fallo sea favorable para los demandantes, el beneficio trascenderá a las 56 familias que firmaron la acción de amparo y se extenderá a todas aquellas que estén integradas por personas autistas y que no puedan acceder a un asistente personal.