Las personas privadas de libertad en la Unidad 6 Punta de Rieles desarrollaron una huelga para reclamar por la situación en la cárcel. La medida abarcó a toda la unidad y comenzó en las primeras horas de la jornada del lunes. Este martes, en apoyo a la situación, sus familias se instalaron en la puerta de la cárcel. Plantearon los mismos reclamos: “represión constante, prohibiciones y falta de diálogo por parte de las autoridades”.

Fuentes del Ministerio del Interior informaron a la diaria que luego del intercambio con las autoridades se levantó la huelga. En la tarde se hizo una reunión con delegados de las personas privadas de libertad en la que se llevaron respuestas a los planteos que recogieron el lunes en la visita a la cárcel tras el inicio de la huelga. “Las partes acordaron el levantamiento de las medidas que implicaban la suspensión de las actividades laborales y educativas y el cese del retiro y distribución de los alimentos elaborados en la unidad”, según señala el Ministerio del Interior.

Hugo Barrera, una de las personas privadas de libertad que participó de la reunión, explicó a la diaria que “entre los acuerdos alcanzados, se resolvió que se instalen emprendimientos del Estado en la unidad y la creación de un Polo Industrial, que las visitas se desarrollen dos veces por semana, mejoras en las instalaciones destinadas a las visitas conyugales y en la frecuencia del uso de patios”.

“Las conversaciones las tuvimos principalmente con Luis Mendoza”, director del Instituto Nacional de Rehabilitación, quien les manifestó “no estar enterado de las decisiones tomadas por el director Omar Vera”. Vera formó parte del intercambio. Mendoza “les dio su palabra de que la decisión de efectuar la huelga no les traerá represalias”, destacó el representante de las personas privadas de libertad.

La destitución de Vera no fue aceptada. “A lo único que no accedieron las autoridades fue al cambio de director de la unidad”, según Barrera. “Nos explicaron que por el momento no apartan del cargo a Vera porque les falta personal, alguien que lo sustituya, pero los demás reclamos quedaron bastante cubiertos”.

“Logramos acordar que se corten las situaciones que se venían dando, por las cuales decidimos comenzar la huelga: las requisas en la madrugada, la prohibición de ropa blanca, el ingreso de alimentos”, señaló Barrera.

También comentó que se retoma la apertura de la circulación: “A partir de ahora, vamos a tener patio de 08:00 a 12:00 y de 13:00 a 17:30”. Y se reabrieron en el momento los salones para visitas conyugales clausurados: “Se rompieron casi todas las trancas a los espacios de visitas conyugales que se habían clausurado en los últimos días y se acordó continuar el diálogo para finalizar el resto de los acuerdos; sobre lo que hoy quedó pendiente”.

Los emprendimientos cerrados no reabren

Parte de los reclamos de las personas privadas de libertad fue el cierre masivo de los emprendimientos productivos, que daban trabajo a gran parte de la cárcel. Si bien dialogaron con las autoridades sobre este tema, no serán reabiertos. “Los emprendimientos que se cerraron no se van a volver a abrir”, explicó Barrera. “La fundamentación es que las modalidades están cambiando y que se van a tomar otras decisiones”, señaló.

Parte de los mecanismos de estimulación para el trabajo presentes en Punta de Rieles tenían que ver con la redención de pena. La redención de pena está enmarcada en la ley 17.897, que establece un día de descuento cada dos días de estudio o trabajo.

Por la presentación de proyectos asociados a emprendimientos se consideraba un régimen “especial” de redención de pena, por lo que se descontaban algunos días extra. Barrera lamentó que esto, que era parte de los reclamos, no formó parte de los acuerdos. “Es algo que hay que continuar dialogando”, dijo.

La salida del pedagogo y sostén del proyecto

Juan Miguel Petit, comisionado parlamentario penitenciario, hizo el seguimiento de la huelga. Si bien prefirió “no tomar protagonismo”, hizo mención al funcionamiento de la unidad desde hace varios años.

“Punta de Rieles fue una referencia, un ejemplo, con un modelo pedagógico muy potente e innovador, amplia circulación, variedad de emprendimientos, con internos financiando sus propias actividades en un ambiente muy semejante al de un barrio, que al cambiar la dirección no se mantuvo”, explicó.

Consideró que esto ocurrió porque “no es fácil acompañar ese tipo de desarrollo”. “Las condiciones muchas veces se terminan cuando se va el pedagogo que en su momento lo instala, en este caso, Luis Parodi”, reflexionó.

Parodi dirigió la cárcel de 2014 a junio de 2020 y logró posicionarla a nivel nacional e internacional. Tras renunciar, Martín Quiró, que venía de dirigir la Unidad 10 Juan Soler asumió su lugar. Nueve meses después fue removido y suplantado por Vera, que hasta el momento dirigía la Unidad 19 Florida. Tras su cese, a Quiró no se le ofreció la dirección de ninguna cárcel y quedó fuera de la órbita del Instituto Nacional de Rehabilitación.

La cárcel que Parodi gestionó “era un modelo pedagógico muy apoyado en el carisma, liderazgo y pedagogía de su director”, según Petit, que agregó que “a veces, en instituciones muy normalizadas, no se mantiene”.

Por otra parte, entiende que “el desafío está abierto y la nueva investigación del Instituto Nacional de Rehabilitación va haciendo su ruta y estableciendo sus formas”. Y resaltó: “En un diálogo que mantuve con las nuevas autoridades, manifestaron tener la intención de incorporar un modelo educativo y humanista”.

Petit entiende que lo importante es que se mantenga “el modelo de un establecimiento que se caracterizó por la rehabilitación y la reinserción, que es lo que todos queremos”. Destaca que “siempre fue una cárcel con seguridad”. “Una cosa no quitaba la otra”, sentenció.

Resolución de conflictos

Respecto al conflicto y su resolución, Petit dijo que “hoy se estableció una lógica de convivencia”, algo que le parece “ampliamente positivo”. “Lo que los internos me comunicaron ayer cuando mantuvimos un diálogo virtual fue el desacuerdo y cambios generales en el día a día, en la convivencia”, señaló.

El comisionado contó que el jueves concurrirá a Punta de Rieles “para intentar iniciar nuevamente un trabajo con promotores de derechos humanos, aportando además un granito de arena en materia de educación”.

El año pasado, “a pesar de la situación sanitaria que atravesaba el país y las dificultades”, mantuvieron su concurrencia a la cárcel, brindando en particular talleres de derechos humanos. “Desde siempre tenemos un sentido de estar presentes”, dijo el representante del Parlamento.

Por último, hizo referencia a que “hay muchos centros en el país que dan educación y herramientas a personas que lo necesitan para rehabilitarse y que eso es totalmente viable”. Para Petit es necesario “convencer a la comunidad y a las autoridades que la rehabilitación es importante y posible”. Remarcó la importancia de invertir, tener objetivos claros y trabajar en la materia.