San Carlos es un eje clave del narcotráfico en Maldonado. Varios grupos delictivos se disputan el territorio y los homicidios en el marco de conflictos criminales han caracterizado el litigio entre las bandas.
Una práctica común entre los grupos delictivos ante un homicidio de un integrante es responder de la misma forma. Así, los asesinatos entre bandas y familias son recurrentes en determinadas organizaciones criminales que se estructuran en torno a grupos de pertenencia.
La familia Correa Balladares es una de las familias vinculadas al tráfico de estupefacientes en Maldonado. Viven en el barrio Rodríguez Barrios de la ciudad carolina. De 2008 hasta ahora, seis hermanos fueron asesinados en el marco de conflictos criminales. Con excepción de uno de los seis homicidios, que fue en la cárcel, el resto fueron todos en la casa de la familia.
El homicidio más reciente fue el de Néstor Fabian Correa Balladares, conocido como el Buñuelo, líder de la banda, y de los pocos sobrevivientes de la familia. Fue atacado ayer a balazos en la casa familiar. Murió en el lugar. Tenía 32 años. Había salido de la cárcel hace unas semanas.
Los homicidios de sus cinco hermanos
El primer homicidio en la familia Correa Balladares fue en noviembre de 2008. José María, alias el Pipí, tenía 31 años cuando lo mataron en la casa familiar en el marco de una discusión. Su hermana presenció el crimen. El homicida se entregó horas después.
Nueve años después, en julio de 2017, Nelson Alejandro fue asesinado en el marco de una pelea en la Unidad 13 Las Rosas, cárcel de Maldonado. Fue el único homicidio que no ocurrió en la casa familiar. Hacía tres meses que estaba preso cuando lo apuñalaron. Tenía 40 años.
En 2019 mataron a tres de los hermanos Correa Balladares. En octubre, Pablo, alias Jaro, de 26 años, fue asesinado a balazos en la casa familiar. Era el único de los hermanos que no tenía antecedentes penales.
En noviembre, diez días después del homicidio de Pablo, su hermano Héctor Rafael, alias El Reca, de 37 años, fue asesinado en la casa familiar. Había sobrevivido a un ataque similar dos meses antes, también en la casa.
En diciembre, Jhonatan Rodrigo, conocido como el Sapito, de 19 años, fue asesinado en la casa familiar.
La muerte de el Buñuelo es la sexta entre los hermanos Correa Balladares. El único sobreviviente de los hermanos varones es Sergio Andrés, de 24 años.
Aunque fue herido de bala en una balacera contra la casa familiar en junio de 2020, pocas horas después de que el Buñuelo saliera de la cárcel, sobrevivió al ataque. Unas semanas después, el Buñuelo y Sergio Andrés cayeron presos. La familia está compuesta, además, por la madre y una hermana mujer.