Un hombre de 28 años, primario en el sistema carcelario, estuvo 60 días secuestrado por otras personas privadas de libertad en el módulo 11 de la Unidad 4 Santiago Vázquez. Las imágenes fueron compartidas en redes sociales por el periodista Gabriel Pereyra.

El hombre fue derivado a la policlínica de la Administración de los Servicios de Salud del Estado para recibir asistencia. Tiene varios problemas de salud: anemia, desnutrición y una infección.

Fuentes confirmaron a la diaria que el hombre era retenido y sometido por sus compañeros de celda. El líder de la celda se fue en libertad y ahí lo soltaron para que reciba asistencia, según fuentes, porque la celda contigua ejerció presión para que esto pase. Lo llevaron al centro de salud en carretilla.

Tiene golpes y cortes en el cuerpo, ya que le pegaban con maderas con clavos en la punta. También tiene una luxación de cadera, asociada a una antigua lesión.

El hombre tiene dos hijos, es de un balneario de Canelones y hace cuatro meses que ingresó a la cárcel por una rapiña.

Luego de conocerse el hecho, se hizo un operativo en todo el módulo: se abrieron todas las celdas para detectar si había otras personas en esta situación.

El módulo 11 es de los peores del Comcar. Hay 750 personas privadas de libertad allí alojadas y en las guardias nocturnas hay sólo dos policías para todo el módulo.

El comisionado parlamentario penitenciario, Juan Miguel Petit, presentó una denuncia penal en Fiscalía por la presunción de múltiples delitos: violencia privada, violación y privación de libertad. Petit dijo a Telemundo que la dirección de la cárcel le informó el jueves de “una situación de abuso, de secuestro en una celda, de un interno. Durante 60 días había sido sometido a todo tipo de malos tratos, de delitos”, entre ellos “secuestro, abuso sexual, amenazas, extorsiones, violencia privada y muchos otros quizás también”. Contó que vio al hombre “muy traumatizado” y “en un estado de salud delicado” y añadió que pidió la intervención de la Fiscalía “urgentemente”.

El Ministerio del Interior (MI) emitió un comunicado respecto a este hecho en el que plantea que el jueves sobre las 14.00 un operador penitenciario “tomó conocimiento acerca del estado sanitario” de esta persona, por lo que lo llevó al centro de salud de la cárcel para que sea asistido. “Una vez allí, el médico de guardia lo atiende, quedando en observación por un cuadro de desnutrición”, informó.

Persona privada de libertad secuestrada y torturada en el módulo 11 del Comcar. (Imagen con el fondo intervenido)

Persona privada de libertad secuestrada y torturada en el módulo 11 del Comcar. (Imagen con el fondo intervenido)

“De las primeras averiguaciones se pudo saber que esa persona habría sido extorsionada y maltratada por parte de uno o más compañeros de celda durante varios días”, señala el comunicado.

El MI consignó los pasos seguidos por el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR). Explicó que “un equipo médico realizó un exhaustivo chequeo de esta persona para conocer su estado clínico”. “La situación de esta persona se desconocía a pesar de que semanalmente los policías recorren el módulo revisando el estado de las rejas”, añade el texto.

El comunicado indica también que el caso “se pudo conocer cuando estuvo en otra celda con otros internos y que inmediatamente se dio cuenta a las autoridades competentes”.

El MI informó que se hizo una denuncia ante la Fiscalía de Flagrancia de segundo turno, a cargo del fiscal Sergio Palomeque, y que se dispuso una investigación administrativa “a los efectos de esclarecer los hechos”.

En el operativo realizado ayer se relevaron todas las celdas y a las 750 personas que están en el módulo 11. “Se pudo determinar que siete privados de libertad sufren un cuadro de bajo peso, en la mayoría de los casos asociado al consumo problemático de drogas”, señala el MI.

Agrega que “el Ministerio del Interior revisará los controles que se realizan entre las personas privadas de libertad con el objetivo de evitar que estas cosas vuelvan a suceder”.

Pereyra informó que Santiago González, director de Convivencia y Seguridad Ciudadana, concurrió al Comcar cuando se enteró del caso, “hizo salir a todos de la enfermería y se quedó con el preso y un policía”. “Cuando González se fue, el preso fue sacado del módulo 11 (uno de los peores) e instalado en el módulo 9 (el más tranquilo)”, señaló Pereyra, que afirmó que “fuentes carcelarias dijeron que González quería saber quién había sacado las fotos que, a esa altura, se sabía que circulaban entre funcionarios”. Finalmente informó que las fotos “tienen editado el fondo ya que había inquietud oficial en cárceles, no por el hecho, sino por saber quién tenía las fotos y cómo”.