Tras conocerse que un hombre de 28 años, primario en el sistema carcelario, estuvo 60 días secuestrado por otras personas privadas de libertad en el módulo 11 de la Unidad 4 de Santiago Vázquez (ex Comcar), el Ministerio del Interior dispuso sustituir al director de ese módulo y aumentar la cantidad de policías para la vigilancia, informó este lunes el titular de la cartera, Luis Alberto Heber. La víctima, que se encuentra internada en el hospital Maciel, había ingresado al módulo 3 del ex Comcar en mayo y pidió ser trasladada por problemas de convivencia. A los pocos días de ser trasladado al módulo 11 fue secuestrado y torturado por sus compañeros de celda, con el objetivo de extorsionar a su familia, que llegó a concretar el pago de unos 2.000 pesos.
“Queremos comunicar nuestro asombro por lo que ha sucedido estos días, la grave preocupación que tiene este ministerio, el director nacional del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) y el director del centro penitenciario, Jorge Camargo, con esa situación que se dio con el preso, su situación física, anímica, y personal que sufrió producto de una instancia de extorsión y secuestro en una de las cárceles de nuestro país”, dijo Heber en conferencia de prensa.
“Venimos a hacernos cargo de esta situación, que duele que esté sucediendo. No importa si sucedió anteriormente, lo importante es que sucedió ahora; nos da vergüenza”, agregó.
Ante la situación, las autoridades decidieron sustituir al actual director de los módulos 10 y 11 de la unidad, José Álvez, y que Marcio Silveira ocupe su lugar.
Cambios en el sistema de revisión de celdas
Heber informó que se va a “intensificar el personal”. Según explicó, el director de la unidad tiene a su disposición cuatro módulos, en cada uno de los cuales conviven unas 650 personas, hay una guardia policial de cuatro efectivos de día y uno de noche. Según detalló el ministro, realizarán los cambios necesarios para que la guardia cuente con “56 policías más y poder armar servicios de ocho policías diurnos y cuatro nocturnos”.
Otras de las medidas que tomó el Ministerio del Interior en esos módulos es cambiar el sistema de revisión de celdas. Según explicó Heber, hasta el momento dos veces por semana se hacía una “visita de reja” que implicaba acercarse a las celdas sin abrirlas -porque no hay personal para eso-, inspeccionar a los privados de libertad y el estado general de las rejas.
A raíz de lo sucedido, el ministro se comunicó con el presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) para que una vez por semana se haga un control de salud de cada uno de las personas privadas de libertad en el módulo 11, y que se revisen las celdas para que “no nos vuelva a pasar este horror”. En tanto, en los módulos 3, 4 y 10 se realizará una revisión médica quincenal.
Construcción de nuevos espacios y puestos vacantes en la Policía
Por otra parte, Heber dijo que hay un problema en la cantidad de efectivos que se hacen cargo de la vigilancia, y enfatizó que en todo el país hay 200 vacantes que no se han podido llenar.
Heber afirmó que en el ex Comcar hay más de 4.000 presos, y los módulos 3, 4, 10 y 11 “son los peores módulos que tiene el sistema carcelario” y ahí “hoy habitan 2.800 presos: fíjense que con el personal que tenemos la rehabilitación es casi imposible”, dijo.
“El compromiso del punto de vista humano de esta administración es transformar esto, pero en estas condiciones es imposible rehabilitar a nadie. Tenemos que trabajar mucho”, destacó el secretario de Estado, y adelantó que desde su ministerio se trabaja en la construcción de tres centros carcelarios modernos en el predio del penal de Libertad. Para eso presentarán un artículo a los legisladores que discuten la Rendición de Cuentas, “para poder financiar esta obra y tres barracones, que son chacras policiales, en Artigas, Tacuarembó y Treinta y Tres”.
Heber no puedo asegurar que no haya otras personas en situaciones similares
Consultado por la diaria sobre si esto puede estar ocurriendo en otros lugares, Heber respondió: “Tenemos que hacer un plan, no lo podemos arreglar de un día para el otro, tenemos que hacer esta revisión en estos módulos, donde por lo menos no nos pase esto que es un horror desde todo punto de vista. Nos duele que esté pasando en otros lugares. No puedo asegurar que no esté pasando en otros lugares, espero que no”.
El ministro puntualizó que hay 14.000 presos y calificó como “temerario” decir que el Estado no tiene el control de las cárceles. “Estos módulos están mal construidos, mal instrumentados, han sido vandalizados, tuvimos que recuperarlos porque no teníamos control; poco a poco pudimos tomar el control poniendo rejas. Si fuera por mí, le pasaríamos con una aplanadora por arriba y a hacerlos de nuevo, pero no podemos. Mientras que no podamos construir no podemos tirar abajo lo que nos parece un horror”, agregó.
Con respecto al caso afirmó que la víctima fue descubierta por la Policía por informaciones que trascendieron en el módulo e inmediatamente fue trasladado para que lo pudieran atender los médicos. Según detalló, el tipo de torturas que recibió fueron “todas las que imaginamos y las que no imaginamos”.
Heber aseguró que la víctima “en primera instancia no quería hacer la denuncia, producto del miedo, pero se le dio todas las garantías por asesores y el director. De todas maneras hicimos la denuncia, no esperábamos la denuncia del preso para poder actuar, la hicimos y el comisionado parlamentario también hizo la denuncia”. Además, informó que los otros tres presos que estaban en la celda fueron separados en distintos módulos y están a la espera del interrogatorio de Fiscalía. También hay abierta una investigación interna para conocer la situación de otras siete personas privadas de libertad que fueron encontradas con desnutrición.
La fiscal Patricia Rodríguez investigará las tres denuncias sobre el caso
El caso fue denunciado en la tarde del jueves por el Ministerio del Interior y el comisionado parlamentario y el viernes la víctima presentó la ampliación de la denuncia, para lograr un mayor alcance de la investigación, que en principio analizará los delitos de tortura, secuestro, extorsión y privación de libertad.
En las primeras horas de investigación, subrogó la fiscal de Flagrancia de 10º turno, Sabrina Flores, quien llamó a la intervención de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía y dispuso las primeras actuaciones en el caso, como la pericia médica de la víctima, el interrogatorio a los victimarios y posibles testigos por parte de las autoridades carcelarias y la realización de una visita a la celda donde estuvo secuestrada la víctima. En la tarde del martes, tomó el caso la fiscal de Flagrancia de 2° turno, Patricia Rodríguez, quien continuará con la investigación. Hasta el momento, Rodríguez estudió la carpeta investigativa y resolvió la designación de la defensa de la víctima.
En diálogo con la diaria, el comisionado parlamentario, Juan Miguel Petit, destacó que la situación tuvo “un impacto y una preocupación constructiva” por parte de legisladores del oficialismo y la oposición y adelantó que será convocado por la Comisión Especial de Seguimiento para el Sistema Carcelario. Petit se reunió con el ministro Heber y conversó con el presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, para analizar el fortalecimiento de la presencia de ASSE en el sistema carcelario.
Petit dijo que el planteo de Heber de realizar una revisión médica semanal de las personas privadas de libertad “es una buena línea” que hay que instrumentar.
Consultado sobre si conocía el sistema de conteo que se aplicaba en el módulo 11, respondió: “El sistema es muy heterogéneo, varía en cada cárcel, en cada sector, en cada guardia y a veces en cada persona”.
“Estábamos al tanto de esa precariedad; cuando hablamos de colapso, el colapso es esto, no es que a las cárceles se las va a tragar la tierra, es un funcionamiento inadecuado que genera daños”, agregó.