Senadores del Movimiento de Participación Popular (MPP) del Frente Amplio (FA) cursaron una serie de pedidos de informe al Ministerio del Interior y a la Fiscalía General de la Nación](https://ladiaria.com.uy/justicia/articulo/2022/5/senadores-del-mpp-cursan-pedidos-de-acceso-a-la-informacion-a-diversas-instituciones-para-cruzar-cifras-de-delitos/). El Ministerio del Interior aún no ha dado respuesta, pero la Fiscalía informó, en una respuesta a la que accedió la diaria y que incluye datos de muertes violentas entre 2014 y 2021, que las muertes dudosas aumentaron en los últimos años.

Muertes dudosas

Durante la gestión del FA, de 2014 a 2019 el promedio de muertes dudosas fue de 80 por año. En 2014 hubo 69 muertes dudosas y 268 homicidios, lo que suma un total de 337 muertes violentas; en 2015 los datos fueron 52, 293 y 345, respectivamente; en 2016, 74, 267 y 341; en 2017, 78, 283 y 361; en 2018 (que fue el año más letal hasta ahora), 103, 420 y 523; y en 2019 (último año de gobierno del FA), 105, 393 y 498.

En 2020, primer año del actual gobierno y pandemia mediante, en términos anuales los homicidios se redujeron a 338 y las muertes dudosas aumentaron a 159, lo que hizo que el año concluyera con 497 muertes violentas. En 2021, los homicidios volvieron a bajar, esta vez a 313, y las muertes dudosas volvieron a subir, a 171. Así es que las muertes dudosas aumentaron 63% de 2019 (105) a 2021 (171).

Muertes violentas

Por otra parte, en el primer trimestre de 2022 se registraron 97 homicidios y hubo 41 muertes dudosas (diez en enero, 14 en febrero y 17 en marzo), con lo cual cerró con 138 muertes violentas.

Los datos fueron presentados por el senador Charles Carrera en el llamado a sala del ministro del Interior Luis Alberto Heber. Según explicó a partir de los datos aportados por la Fiscalía, “en 2021 hubo una muerte dudosa cada dos días”, y cabe considerar estos casos porque “existe la clara posibilidad de que sean homicidios”.

“Concluimos entonces que en Uruguay cada dos días existieron tres muertes violentas, dos homicidios y una muerte violenta dudosa”, indicó el senador del MPP. Por eso, sostuvo, “con los datos oficiales vemos que en los últimos tres años no han variado sustancialmente las muertes violentas en Uruguay”, ya que hubo 498 en 2019, 497 en 2020 y 484 en 2021.

En este sentido, Carrera cuestionó: “¿En realidad bajaron los homicidios o simplemente aumentaron las muertes dudosas?”.

El criterio para contabilizar los eventos de seguridad pública

En la respuesta al pedido de acceso a la información pública se destaca que los “títulos de las denuncias”, es decir, las categorías que se cargan en el Sistema de Gestión de Seguridad Pública y que luego se consideran para el análisis “son seleccionados por los funcionarios del Ministerio del Interior que recepcionan las denuncias según su interpretación del delito”. En este sentido, “en base al análisis jurídico de la situación [a cargo de la Fiscalía], puede diferir del delito que el fiscal decida imputar posteriormente”.

A su vez, en lo que respecta a las cifras de homicidios, hay diferencias entre los datos del Ministerio del Interior y la Fiscalía por el registro de estos hechos. El Ministerio del Interior cuenta los homicidios “dolosos”, es decir, cuando hay intención de matar. La Fiscalía, por su parte, cuenta todos los casos en los que hay un homicidio y se investiga, como puede ser una legítima defensa o un policía que mata a una persona en un accionar policial legal.

¿Qué es una muerte dudosa?

Javier Donnangelo, director del Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior, definió en la diaria a las muertes dudosas como las "situaciones en las que la Policía concurre a un lugar donde hay un cuerpo y esa escena no presenta alteraciones importantes. No hay señas anormales de ninguna índole, pero, al mismo tiempo, tampoco hay testigos. O sea que inicialmente subsiste un leve margen de incertidumbre respecto a qué pudo causar esa muerte. Esas dudas normalmente se van despejando en el correr de los días, en la medida en que se van realizando algunas indagatorias: se cita a declarar a algún familiar, algún vecino. O el cuerpo es periciado por técnicos del Poder Judicial, del Instituto Técnico Forense, que lo examinan y determinan si se trató de una muerte por causas naturales o externas". "En la medida en que esas informaciones adicionales van llegando, el título inicial de 'muerte dudosa' se va ajustando y puede cambiar a otra tipificación, que puede ser de homicidio, suicidio o muerte natural", explicó. Según Donnangelo, “conforme la situación siga volviendo a la normalidad, deberían volver al nivel prepandemia”, cuestión que hasta ahora no se traduce en las cifras oficiales.

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