El presidente Luis Lacalle Pou declaró como testigo en la causa que investiga a su exjefe de seguridad, Alejandro Astesiano. Según informó Así Nos Va de radio Carve, el mandatario brindó su declaración el lunes 26 de diciembre, ante la fiscal del caso Gabriela Fossati, en la residencia de Suárez y Reyes.

Según confirmaron tres fuentes independientes al programa de radio, Lacalle Pou se reunió con la fiscal entre las 10.30 y las 14.30. Consultada al respecto, Fossatti se excusó de responder diciendo que se encontraba de descanso en el período de feria y que se le podía volver a escribir en febrero.

Desde la Fiscalía General de la Nación confirmaron a la diaria que el fiscal de Corte, Juan Gómez, otorgó a pedido de Fossati, una habilitación especial para trabajar en el caso Astesiano hasta el 29 de diciembre pese a la feria judicial, que comenzó el 25 de diciembre.

Por el caso también declaró recientemente como testigo la expareja del presidente, Lorena Ponce de León. Consultada sobre esa declaración, Fossati dijo días atrás que decidió adelantar la declaración de Ponce de León después de que se hiciera público un chat en el que Astesiano le pedía de forma reservada al subdirector ejecutivo de la policía, Jorge Berriel, información sobre un vuelo que iba a abordar la expareja de Lacalle Pou.

“Se le dio prioridad a la entrevista para escuchar a la señora Ponce de León y verificar que sus derechos no hubieran sido afectados. La respuesta fue un no contundente [...] En todos los países del mundo se aplican protocolos y por algo están. Me quedó claro que no hubo ninguna situación incorrecta y el tema de la investigación quedó terminado”, sostuvo Fossati.

El 4 de julio, a las 2.44, Astesiano le escribió a Berriel: “Tenemos modo reservado averiguar Lorena Ponce de León. Viaja mañana a las 6 de la mañana. Donde va. Reservado Total [sic]”. Berriel le responde un minuto después, a las 2.45.47: “Complicado pero veremos”.

Astesiano también probó con un integrante de la custodia de Ponce de León, quien bromeó con irse a trabajar con él si la entrega de la información-pedida por canales informales y bajo reserva- le generaba problemas. “Si me corre Loli, me voy de secretario tuyo jaja”, le escribió a Astesiano.

Cuando la fiscal Fossati consultó a Astesiano por este hecho el exjefe de seguridad presidencial declaró que era parte de su trabajo tener conocimiento de los movimientos de todos los integrantes de la familia del presidente.

Desde la detención de Astesiano, el 25 de setiembre de 2022, el caso derivó en varias líneas de investigación, por lo que la fiscal Fossati dispuso a fines de noviembre la división de la causa, que tiene ya cuatro carpetas distintas. La primera refiere a la organización criminal dedicada a la expedición de pasaportes uruguayos; otra, al pedido de tareas de inteligencia contra los senadores del Frente Amplio Mario Bergara y Charles Carrera; una tercera, al vínculo entre Astesiano y las jerarquías policiales; y la más reciente, a las filtraciones a la prensa que surgieron en la propia investigación.

Fuentes vinculadas a la causa informaron a la diaria que la semana pasada comenzaron a declarar ante Delitos Complejos los primeros funcionarios y abogados que accedieron a los archivos. Si bien la mayoría de los abogados de los investigados aún no fueron citados, las fuentes señalaron que está previsto que sean convocadas todas las personas que tuvieron acceso a la carpeta, aún cuando ya no estén en el caso o el acceso a la carpeta haya sido circunstancial. Algunos de los abogados que declararon sostuvieron que la imagen de su cliente se deterioró con las filtraciones por lo que se consideran víctimas en esa parte de la causa, más allá de que las filtraciones puedan no haber afectado el transcurso de la investigación penal.