El religioso paraguayo José Alberto Insfrán Galeano se entregó este jueves ante la Fiscalía paraguaya luego de permanecer dos años prófugo. Se trata del hermano de Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, el principal socio del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset y una de las personas señaladas como presunto responsable del asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci. Tío Rico fue detenido en febrero en Río de Janeiro y está actualmente preso en Paraguay.

El “pastor narco” decidió entregarse porque recibió un “mensaje divino”, según contó su abogado, Daniel Lobos, en la emisora Monumental 1080 AM. Insfrán Galeano, pastor de la iglesia Centro de Avivamiento de Curuguaty y exprecandidato a la Gobernación de Canindeyú, tenía una orden de detención en el marco de A Ultranza, el mayor operativo antidrogas de la historia de Paraguay, que colocó a la organización de Marset en el centro de la polémica.

El abogado Lobos dijo que el religioso “se declara inocente” y aseguró que lo podrá probar ante la Fiscalía. “Soy una persona que le sigo a Dios y hace 15 días me dijo que llegó el tiempo de presentarnos”, declaró, por su parte, Insfrán Galeano en una entrevista con Radio Ñandutí.

En otra entrevista con la emisora ABC Cardinal, el religioso paraguayo reveló que su hermano, Tío Rico, era abogado de Marset. También dijo que el exdiputado del Partido Colorado paraguayo Juan Carlos Ozorio era integrante de su iglesia y fue la persona que le presentó a Marset, a quien conoció personalmente en un campamento religioso.

En el marco de los operativos de A Ultranza, Ozorio fue imputado por lavado de dinero, tráfico de drogas y asociación criminal.

Según los documentos de A Ultranza, el pastor Insfrán Galeano es investigado por presuntos delitos de lavado de activos vinculados al tráfico de drogas. Además de su responsabilidad en el Centro de Avivamiento de Curuguaty, había dos empresas que estaban a su nombre: la agroganadera Nuevo Horizonte y la metalúrgica El Porvenir.