Gabriela Fossati, fiscal a cargo del caso del exjefe de custodia presidencial Alejandro Astesiano, pidió certificación médica por 15 días, según informó el responsable de comunicación de la Fiscalía General de la Nación, Javier Benech. La fiscal tomó esa decisión luego de que el programa Legítima defensa divulgara audios suyos en los que sostiene que la investigación de este caso “no va a poder llegar a su fin porque las piedras son permanentes” y que “todas las personas que están dirigiendo los organismos” por “lo único que se preocupan es por tratar de tapar”. Benech aclaró que desconoce los motivos de la certificación, ya que las cuestiones vinculadas a la salud son reservadas.

Según informó el periodista Gabriel Pereyra en su cuenta de Twitter, Fossati también envió una carta al fiscal de Corte, Juan Gómez, en la que explica que los audios divulgados fueron fruto de una conversación privada que mantuvo con el periodista Carlos Peláez, que no era su intención que tomaran estado público y que algunos de los asuntos mencionados se fueron solucionando con el tiempo. No obstante, le pidió que la releve del caso Astesiano. Fossati ya había manifestado en otra ocasión, en noviembre de 2022, su voluntad de apartarse de este caso. “Lo mejor parece ser que yo no lo siga”, dijo en aquella oportunidad.

El audio completo de Fossati: “Esto es una bomba de tiempo”

En el audio de Fossati, al que accedió la diaria, la fiscal dijo que el caso Astesiano lo armó “a puro trabajo”, le llegó “sin quererlo” y, como es “responsable”, lo trabajó “yendo hacia el fondo”; no obstante, le dijo al periodista: “Tú te imaginarás: acá el tema es que surgen los nombres de todas las personas que están dirigiendo los organismos que me tienen que investigar. En realidad, quienes tienen que preocuparse por limpiar la situación o tendrían que estar preocupados por los resquicios evidentes que hay en sus instituciones, [por] lo único que se preocupan es por tratar de taparlo”. La fiscal agregó que “del otro lado” están los que quieren “sangre” pero “por un interés político”.

Luego Fossati dijo que el fiscal de Corte “increíblemente da señales claras” en cuanto a que la quiere “clavar” a ella con “los malos resultados de una investigación que no va a poder llegar a su fin porque las piedras son permanentes, las filtraciones de información son de todos los ministerios, de Presidencia y de Fiscalía”. Además, la fiscal negó que este caso sea “un trampolín” para su carrera, dado que tiene “31 años de magistrada” y está “al final”.

“Al mismo tiempo, me quieren atar a mí con la investigación, cuando ponen piedras; lo que están pretendiendo es que precisamente la investigación fracase, y que haya un nombre, una cara responsable, que sea yo. Entonces, la verdad, acá la Justicia no le importa a nadie, a ninguno de los dos lados. Unos quieren tapar todo; fijate que quienes están mencionados siguen siendo los que dirigen a quienes me tienen que auxiliar”, sostuvo.

Además Fossati señaló que hay jerarcas del gobierno que dicen cosas “que claramente no son”, por ejemplo cuando Francisco Bustillo, ministro de Relaciones Exteriores, dijo que “no hay ningún funcionario involucrado”, pero, para la fiscal, “queda claro que se está investigando porque hay elementos”, y “está claro que es un horror lo que pasaba en la Dirección Nacional de Identificación Civil”.

“Juan Gómez dice que me dio todas las condiciones para dedicación exclusiva, y es mentira, yo estoy en una Fiscalía de Flagrancia, que no le corresponde estar en este caso. Tuve que dejar de lado todos mis casos para atender yo, estoy haciendo las tareas administrativas para que salga adelante, y cada cosa que yo voy avanzando, las mismas personas que me tienen que ser los auxiliares lo filtran para que se enchastre. Entonces, yo ya no estoy para inmolarme a esta altura de la vida, y lo mejor es que la cosa quede clara, que esto es una bomba de tiempo, y que quede claro que a nadie le interesa”, sostuvo.

Gómez: “No se ha ensuciado nada”

En diálogo con la diaria, el fiscal Gómez señaló que en realidad no recibió ninguna carta de Fossati, sino que la “puede haber mandado a la Secretaría de la Fiscalía de Corte”, pero “obviamente” él no maneja la secretaría, ya que “bastante” trabajo tiene. De todas maneras, Gómez confirmó que Fossati pidió licencia médica por 15 días, pero él no lo hizo público “por respeto a cualquier persona que esté certificada”. “Y [Fossati] me mandó los famosos audios, pero -quizás por respeto a mí mismo- no tengo ningún comentario para hacer”, acotó Gómez.

Ante las dos semanas de licencia que Fossati tiene por delante, Gómez dijo que ahora deberán “analizar detenidamente” los pasos a seguir, pero “no por nada muy especial” sino por una cuestión de “ausencia de recursos”, porque la Fiscalía “debe seguir funcionando, como corresponde”. “La certificación es hasta el 19 de marzo, así que de alguna forma hay que prever quién ayudará o quién subrogará esa fiscalía”, subrayó.

Sobre los dichos de Fossati, sobre que la investigación del caso Astesiano no puede llegar a su fin “porque las piedras son permanentes”, Gómez dijo que no puede opinar porque no conoce la situación, pero subrayó que se trata de “una percepción que tiene alguien que está trabajando en un tema y que obviamente lo conoce”. Además, destacó que a Fossati le manifestó que de Fiscalía “no se ha filtrado nada” y que él no lo “permitiría de ninguna forma”.

“Desde la Fiscalía no se ha filtrado nada, no se ha ensuciado nada y no se ha impedido que la fiscal cumpliera con su responsabilidad de llevar adelante una investigación. Hasta ahí es cuanto tengo para manifestar”, finalizó.

Peláez: “En ningún momento me pidió reserva”

Por su parte, el periodista Carlos Peláez explicó a la diaria el contexto del audio de la fiscal. Dijo que el sábado 19 de noviembre en Radio Sarandí informaron que Fossati le había pedido a Gómez que la apartara de la causa; por lo tanto, Peláez le escribió un mensaje de Whatsapp preguntándole si era cierto, y Fossati le contestó con “dos audios seguidos”, y uno de ellos fue el que se difundió. “En ningún momento me pidió reserva ni off the record ni nada por el estilo. Yo he hablado muchas veces con ella por otros casos, y siempre me decía 'esto es para ti' o 'después te digo cuándo se puede publicar'. Me conoce hace 25 años, por lo menos. Así que no es cierto. Yo no la grabé, obviamente; ella me mandó el audio”, indicó.

El periodista dijo que en noviembre, luego de que la fiscal le mandara el audio, debatieron con la dirección de la revista Caras y Caretas -donde trabaja- “sobre la conveniencia o no de darlo a conocer”. Subrayó que lo que expresa la fiscal en el audio “es de extrema gravedad institucional” y de “alto interés público”. Finalmente, en la revista coincidieron con que en noviembre no era el momento indicado para hacerlo público, “para no afectar la causa”, por lo tanto, decidieron publicarlos luego de que la investigación llegara a su fin.

Además, Peláez aseguró que después de que la fiscal le mandó el audio, él le dijo que a raíz de su testimonio le quedaba la sensación de que “estamos en un Estado mafioso” y eso había que escribirlo, a lo que Fossati le contestó: “Y escríbanlo”. “Ella sabe perfectamente cómo fue. Claro, ahora me odia, pero es su problema, yo no fui el que habló, sino ella. Yo le pregunté si era cierto lo de Sarandí”, insistió.

Por último, Alberto Grille, director de Caras y Caretas, también dijo a la diaria que Fossati no pidió “ningún tipo de reserva”, así que nunca consideraron que el audio fuera algo reservado; independientemente de que “también se podría discutir si ante un audio de ese calibre alguien tiene derecho a no decirlo”.

A su vez, sobre la denuncia por difamación e injurias que Fossati presentó contra Grille, por varias columnas de opinión en la revista, el periodista señaló que por ahora no le llegó ninguna notificación. “Mientras no me notifiquen y no sea citado, tenemos para estar contentos todos los periodistas y los medios, por la libertad de prensa y de opinión. Podemos estar tranquilos, no tenemos miedo”, finalizó.