La semana pasada trascendieron los audios de la declaración que le tomó el fiscal Fernando Romano a Alejandro Astesiano, exjefe de la custodia presidencial, mientras subrogaba a la fiscal Gabriela Fossati durante su licencia médica. Romano se entrevistó con Astesiano porque el ahora condenado había dicho estar bajo amenaza en la cárcel. En esa entrevista Astesiano habló sobre distintos temas en los que involucró directamente a Luis Lacalle Pou, presidente de la República. Declaró que el presidente sabía de sus indagatorias y apuntó contra Lacalle por la pesquisa contra Mario Layera, exdirector de la Policía Nacional.

Según informó el periodista Eduardo Preve en Nada que perder de M24, la difusión del audio generó molestias en Presidencia. Tras el “enojo” que generó que estas acusaciones se hicieran públicas, Lacalle Pou llamó al fiscal de Corte, Juan Gómez, quien no quiso hacer declaraciones sobre esta comunicación.

La llamada fue el miércoles pasado, y al día siguiente Gómez ordenó una investigación de urgencia en Fiscalía para determinar si el audio de la declaración de Astesiano ante Romano “se había filtrado”. Esta investigación comenzó el viernes. Ya declararon dos fiscales que tuvieron acceso a la carpeta y el coordinador que está actuando en este caso. También declararon funcionarios de Fiscalía.

Desde Fiscalía aclararon que Gómez inició la investigación administrativa “sin llamado de nadie” y “sin intervención alguna”.

Según indicaron, el fiscal de Corte “tomó conocimiento por la prensa del audio de la declaración de Astesiano el martes 25 por la noche” y “el miércoles 26 a primera hora dispuso sin intervención de persona alguna una investigación administrativa”.