La jueza de Crimen Organizado Adriana Chamsarián definió la prisión preventiva de Martín Mutio, condenado a 15 años de penitenciaría por los delitos de lavado de activos y exportación de estupefacientes, en la causa que investigó el hallazgo de 4,5 toneladas de cocaína en el puerto de Hamburgo.

La decisión, que será apelada por el abogado de Mutio, Florencio Macedo, llega luego de que la fiscal especializada en Estupefacientes, Mónica Ferrero, reclamara la prisión preventiva para Mutio, dado que no había sido dispuesta por el tribunal que lo condenó, en función de que la condena aún no estaba firme.

Tras una audiencia llevada a cabo en la tarde del viernes, Chamsarián dispuso la prisión preventiva de Mutio por 180 días. Si bien la Fiscalía había planteado en su argumentación la posibilidad de que Mutio entorpeciera la investigación, además del riesgo de fuga, Chamsarián consideró sólo la existencia de un riesgo de fuga, en función del monto de la pena y de las posibilidades económicas y de redes sociales de Mutio para eludir la Justicia.

En diálogo con la diaria, el abogado de Mutio, cuestionó la decisión y señaló que “en 24 horas” su cliente “pasó de ser inocente a ser el principal narcotraficante del Uruguay”. “Es un inocente que está privado de libertad y eso no es una buena noticia para nadie. El nuevo código justamente se promovió para que no haya inocentes presos, que vayan presos cuando son culpables”, expresó el abogado con referencia a que la condena, que rebatió la absolución en primera instancia, no está firme.

Macedo dijo que es una causa “muy compleja” y que “en el transcurso del tiempo se pueden olvidar algunos hitos” y mencionó “el ocultamiento de pruebas por parte de la Fiscalía” y que una pericia asegura que “evidentemente los precintos fueron clonados”, además de “un perito contable que establece la imposibilidad absoluta de que haya lavado dinero”.

“Todo eso no fue valorado por el tribunal en esta etapa y nosotros vamos a insistir con nuestros argumentos ante la Suprema Corte de Justicia”, señaló estimando que la casación será presentada luego de la feria de invierno.

La causa se inició el 2 de agosto de 2019, luego de que aparecieran en el puerto de Hamburgo, Alemania, 4.200 paquetes de cocaína colocados en 211 bolsos deportivos, que llegaron como parte de una exportación de soja destinada a un comprador italiano en Amberes, Holanda.

La exportación se hizo en cuatro contenedores, tres que fueron cargados en la localidad canaria de Los Cerrillos y uno, el que fue contaminado, que fue cargado en la localidad de Libertad, en San José.