La Justicia condenó al adolescente de 17 años que había sido imputado por el triple homicidio ocurrido en diciembre, en un almacén de Estación Floresta.

La fiscal de Ciudad de la Costa de tercer turno, María Cristina Falcomer, pidió la condena del adolescente por tres delitos de homicidio complejo muy especialmente agravados y un delito de rapiña agravada, en calidad de autor, y dispuso una pena de ocho años de internación en el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente, lo que fue aceptado por el juzgado de Atlántida, en un proceso simplificado.

Esa vía procesal tiene las mismas características de un juicio, en cuanto a que es necesaria la producción de prueba en la audiencia y no implica necesariamente, como en el caso de los acuerdos abreviados, la aceptación del delito por parte del condenado. Al tratarse de un adolescente, el proceso es reservado.

Si bien la pena máxima para adolescentes infractores es de cinco años, el artículo 91 del Código de la Niñez estableció a través de la ley de urgente consideración un incremento de hasta diez años para los delitos de homicidio intencional muy especialmente agravado y delitos sexuales.

La fiscalía, que contó con el apoyo de la Unidad de Litigación, continuará la investigación penal con los otros detenidos por este caso, entre ellos el joven de 21 años que fue imputado como coautor de homicidio, tras encontrar elementos que lo ubican en la escena del crimen, y del hombre de 35 años, Claudio Cancelo, quien fue detenido el sábado 13 en Malvín Norte, luego de estar tres semanas prófugo de la Justicia.

Cancelo fue imputado por homicidio muy especialmente agravado, un delito de rapiña especialmente agravado por la participación de varias personas y por haber usado armas, y un delito de lesiones personales.

El triple homicidio de Estación Floresta ocurrió en la tarde del 23 de diciembre, cuando tres personas llegaron en moto al comercio, donde funciona un almacén y una mercería e intentaron rapiñar el lugar y luego, por circunstancias que aún se están investigando, dispararon contra la dueña del local, su pareja y el hijo de ambos. La hija, de 22 años, fue la única sobreviviente del ataque.

Al inicio de la investigación se identificó a Claudio Cancelo como uno de los responsables del crimen. El hombre, que vivía a una cuadra del comercio y conocía a la dueña del local, negó en todo momento su participación en el hecho y mientras estaba prófugo hizo varias publicaciones en redes sociales negando su responsabilidad en los hechos.

En una de esas comunicaciones, Cancelo cuestionó a la fiscal que trabajaba en el caso Tania Vidal y dijo que estaba en Brasil, pero la Policía, a través de la interceptación de su teléfono, lo ubicó en una vivienda de Alejandro Korn y Euskal Erría, en Malvin Norte, luego de que pidiera comida.