Asombrados por la intensidad del turismo compatriota en la otra orilla del Río de la Plata, decidimos que queríamos saber más sobre su causa principal, la diferencia de precios, y encargamos una cobertura sobre las peculiaridades del mercado cambiario argentino. Cuando la recibimos, el asombro aumentó: no hay una ni dos, sino muchas maneras legales e ilegales de cotizar dólares y pesos argentinos.
Pueden leer esa cobertura sobre el “dólar blue” en esta edición, con la que de algún modo tratamos de registrar parte del curioso tiempo pospandémico que vivimos desde hace algunos meses. Porque si de algún modo hay una reactivación del tipo de consumo que implica un pequeño viaje al extranjero, también es cierto que esa tendencia convive con una crisis social que se palpa en la existencia de centenas de ollas populares y en la disminución del poder adquisitivo de la mayoría de los asalariados.
Cabe pensar también, con el riesgo de sonar aguafiestas, cuán “exterior” es un país con el que compartimos tanto. Es decir, por cuánto tiempo puede sostenerse una situación muy despareja entre realidades tan próximas. Pero quizás no estoy hablando sólo de Argentina y Uruguay, así que los invito a cambiar de tema.
Hablemos de nuestra portada, que, por primera vez desde abril de 2021, cuando empezamos a dedicarla a personas destacadas, retrata a alguien que ya no está vivo. El guitarrista Toto Méndez murió hace unas semanas y nos pareció que podía ser un buen homenaje publicar la versión “aumentada” de una entrevista que nos concedió a principios de año. En ella se expresa, entre otros temas, sobre caminos muy atendibles de “ser uruguayo”.
Hasta la próxima.