Variedad de perspectiva, o “que haya de todo”: como desde el inicio, en este número intentamos acercarles distintos temas y abordajes. Encontrarán, o ya encontraron, un ensayo sobre distorsiones de Marx, una mirada a la fauna playera en San José, un reportaje sobre la vida rural, dos cuentos, un fotorreportaje sobre la guerra en Europa y varios relatos humorísticos.
Además, está nuestra entrevista central, en la que la actriz Andrea Davidovics repasa su carrera en la Comedia Nacional y también recuerda sus años como cantante de rock en La Tabaré Riverock Banda durante la posdictadura. En ese tramo de la charla, la artista se ubica a sí misma en la generación del 83, es decir, entre aquellos que fueron militantes estudiantiles durante los últimos años del régimen.
Hay diversos relatos sobre qué fue y qué representa hoy esa generación, transversales a distintos partidos. En algunas interpretaciones, fue un grupo que cedió protagonismo cuando retornaron los líderes exiliados, particularmente en la izquierda. Hoy, sería la camada que, a pesar de muchas postergaciones, debe ocupar posiciones de liderazgo político, sobre todo en el Frente Amplio y el Partido Colorado (en el Partido Nacional la historia es distinta porque hoy su líder, Lacalle Pou, ya pertenece a una generación más joven).
En esas versiones, entonces, la generación del 83 aparece asociada a la idea de renovación. Así presentado, puede resultar contrastante que gran parte de la charla con Davidovics gire en torno a su jubilación como integrante del elenco teatral oficial de Montevideo. Hay matices, por supuesto: los tiempos en la política no son los mismos que en otros ámbitos, y Davidovics misma, al presentar sus proyectos, deja claro que no habla de un retiro, sino más bien de un posible renacer artístico.
Seguramente esa idea de recomienzo y entrega a una pasión, en lugar de lo puramente generacional, sea el punto central de la charla. Qué es ser joven, ya sabemos, es también cuestión de puntos de vista.