El objeto minúsculo
Estrellea
(imprevisto fulgor de señal viva). Diminuto
temblor. Afuera es noche
¿Es señal su destello / alerta, mal augurio, agónico bracear
su parpadeo / espejo
de señales?
El pensamiento indaga
la breve superficie su ojo abrupto
de acero (centella pharos)
que un chispazo
refracta de la luz de la sala:
minoridad de víctimas
evoca aliento fibrilante cuerpo al agua madero zozobrado
Es un pequeño objeto
y el mundo en que rebrilla
en este instante
un matadero.
***
Destruir
unas ramas
del uso de la lengua (las más altas) mochar la realidad injertar simulacro
someter
el discurso a formato afilado
con tijeras de marketing podar
el universo
de representaciones
con paso coreográfico desviar
la atención con espectáculo
montar el tabladillo
de esperanza y confeti —el logos tecnocrático, su terreno
cercado— mentir con clase
y blindaje mediático, sonreír en piñata de selfies reclutar
tropa
en las incubadoras de think tanks que la Harvard
Business School (como legiones de la antigua Roma) enclava
en la comarca.
Nubes velan
las brújulas del cielo
no desnudan
las horas que vendrán: a tientas a deshora
se adivinan
lo que vendrá es
pálpito. Cálculo
que no cierra.
Deriva. Tatiana Oroño. Estuario, 2023. 96 páginas.