Día a día los seres humanos y los ecosistemas estamos expuestos a nuevos contaminantes (contaminantes emergentes), que en muchos casos presentan efectos desconocidos en los seres vivos, los cuales luego de liberarlos son identificados y demostrados sus efectos por la comunidad científica enfocada en la conservación ambiental.
El contacto diario y masivo con plásticos en los alimentos, ciertos detergentes y formulaciones químicas, nos afectan negativamente a largo plazo y de manera subletal; y no son de notoria preocupación en nuestra sociedad. Ciertos efectos conocidos como perturbaciones endócrinas las generan sustancias denominadas EDCs, del inglés Endocrine Disrupting Chemicals.
Las EDCs se refieren a sustancias que afectan las señales internas químicas, es decir, las hormonas de los seres vivos. Pueden actuar como hormonas al unirse a sus receptores; alterando la síntesis de hormonas; o activando o inhibiendo las señales químicas.
Los efectos son muy variados. A muy bajas concentraciones no son letales para los organismos, pero pueden ocasionar efectos adversos a largo plazo, incluso efectos generacionales.
Algunos plastificantes, detergentes y resinas son sustancias que imitan a la hormona Estradiol, y se los denominan estrogénicos. Al liberarse al ambiente y acumularse en ríos y arroyos, estos químicos tienen un efecto muy notorio en peces y anfibios. Los estrogénicos afectan la reproducción, en particular el sistema reproductor masculino, llegando a ocasionar extinciones locales.
Otro efecto a nivel humano es que los estrogénicos promueven carcinomas dependientes de hormonas, como es el caso del cáncer de mamas. En Uruguay tenemos una alta incidencia de ésta enfermedad y sufrimos centenares de muertes al año. Si bien contamos con un sistema de diagnóstico masivo y diversos tratamientos, no contamos con medidas preventivas. Una de ellas es reducir la exposición a sustancias estrogénicas.
¿Cuáles son esas sustancias y donde se encuentran? La gran mayoría se encuentran en los distintos tipos de plásticos. Policarbonatos, PVC, papeles térmicos, envases PET, pero también en detergentes, pinturas, resinas y formulaciones de biocidas. Dentro de estos contaminantes se encuentran el Bifenol A, ácidos ftálicos, PBDEs, alquilfenoles, etc.
Solo para dimensionar la situación actual: el bifenol A es uno de los compuestos químicos orgánicos de mayor producción a nivel mundial, supera las 5 millones de toneladas anuales y, si bien se han desarrollado sustancias alternativas como el bisfenol-S y bisfenol-F, su inocuidad se encuentra en discusión.
Dentro del equipo de investigación en el CURE (Universidad de la República) que nos enfocamos en estudiar estos contaminantes, nos enfocamos en la presencia de sustancias estrogénicas en las cuencas y costa Uruguaya. En particular nos hemos enfocado en la cuenca del río Santa Lucía, del arroyo Maldonado y costa del Río de la Plata.
Para ello, desarrollamos (optimizado) un método in vitro en laboratorio que se presenta como una excelente alternativa al empleo de animales vertebrados en monitoreo ambiental. Hemos detectado estrogenicidad en agua y sedimento asociado a distintos usos de suelo. En paralelo, realizamos screening de actividad estrogénica en productos de consumo diario, y colaboramos con un equipo de la Facultad de Química enfocado en el desarrollo de sistemas de degradación de sustancias estrogénicas mediante el empleo de enzimas obtenidas de hongos, que tienen la capacidad de degradar sustancias recalcitrantes.
Desde la parte de regulación de los EDC´s, Uruguay no ha adoptado una política como lo hizo con otras sustancias carcinógenas, resultando así en la falta de instrumentos legales (leyes, normas, programas, planes, etc ) que permitan controlar la comercialización y uso de los EDC´s.
Desde hace décadas, la Unión Europea, Estados Unidos y otros países regulan o prohíben aquellas sustancias que han demostrado ser EDCs. Las respuestas de los tomadores de decisiones sobre esta problemática de la salud humana y ambiental deben darse cuanto antes de manera de prevenir los riesgos de exposición en éste mundo en constante exposición a los plastificantes.
Uruguay debe crear un marco legal robusto que proteja a las poblaciones vulnerables (mujeres embarazadas, niños, trabajadores que manipulen EDC´s) ante la exposición a EDC´s, además de generar un sistema de monitoreo destinado a evaluar la presencia de estas sustancias en el ambiente.
El doctor Javier García-Alonso es profesor agregado e investigador del Centro Universitario Regional Este (CURE) de la Universidad de la República