En las últimas semanas, varios establecimientos en Maldonado debieron reducir su aforo y trabajar con menos empleados. Algunos locales gastronómicos cerraron por unos días por la emergencia sanitaria.

La ola de contagios por la variante ómicron rompe récords diarios a nivel nacional y Maldonado no es la excepción, y la coyuntura empezó a tener impactos en materia de salarios y fuentes de empleo que dependen de la temporada.

Las situaciones son variadas. Por ejemplo, el secretario departamental del Sindicato Único Gastronómico y Hotelero del Uruguay (SUGHU), Óscar Andino, denunció que un hotel boutique de Punta del Este no ha cumplido con los pagos de salarios desde octubre y están “mal cargados” los seguros de paros en el Banco de Previsión Social (BPS).

También habló de una situación de conflicto en un restaurante de la zona portuaria: “Nuevos funcionarios se afiliaron al sindicato y los despidieron”, aseguró el dirigente.

Andino indicó que el sector tenía grandes expectativas con la temporada de verano tras un largo receso. “Algunos trabajadores hace 15 meses que están en el seguro de paro”, indicó.

Una medida del gobierno que continúa vigente para el rubro es el seguro de paro parcial. El sindicalista aseguró que por este beneficio varios trabajadores que cobraban unos 20.000 pesos líquidos actualmente ganan entre 8.000 y 15.000 pesos, una situación que se ha vuelto “inviable” debido a que el costo de vida y los precios “han aumentado”.

Por su parte, el integrante de la comisión directiva del Sindicato Unido de Trabajadores de Edificios de Maldonado (Sutem), César Teijón, dijo a la diaria que algunos establecimientos han “obligado” a sus funcionarios a atender y dar servicios en habitaciones con huéspedes que dieron positivo a coronavirus. “Eran trabajadores eventuales y esa gente terminó despedida”, aseguró el sindicalista, y dijo que esto fue planteado por la vía judicial.

Andino y Teijón señalaron que los controles del cumplimiento de los protocolos sanitarios por parte del Ministerio de Salud Pública (MSP) son casi “inexistentes”. Según dijeron, a los huéspedes y turistas se les debe pedir “el mismo cumplimiento” de las normas sanitarias que deben cumplir los funcionarios de cualquier local gastronómico, hotel o edificio.

Para Teijón es “complejo” que los funcionarios tengan que controlar que los huéspedes cumplan cuarentenas, aislamientos preventivos por contagios o que no salgan a la calle cuando son positivos.

“El Ministerio de Salud Pública no tiene control sobre la gente que llega a los apartamentos y a veces tenemos dificultades para trasladarles que no pueden salir de sus unidades”, comentó.

Teijón denunció además que algunos trabajadores se contagiaron y cuando quisieron retomar sus actividades laborales les comunicaron que “ya no los necesitan”. En su opinión, los ministerios de Salud, Interior, Trabajo y Turismo no trabajan de forma coordinada para “sobrellevar la situación y realizar los controles necesarios” en Maldonado.

El Sutem, que integra la Federación Uruguaya de Comercios y Servicios, pidió una reunión con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social para trasladar estas inquietudes.