La Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP) comenzó este jueves su XIII Congreso Miguel Soler Roca –en homenaje al fundador de la federación, fallecido hace tres años– con el desafío de generar compromisos políticos con el futuro de la educación pública del país. En el Argentino Hotel de Piriápolis están reunidos más de 300 delegados, de 30 filiales de todo el país, que trabajaron durante el año en diferentes comisiones temáticas para que el plenario defina cómo interpelará a los candidatos presidenciales a partir de junio.
“Es un año sumamente importante para nuestro país, un año electoral, lleno de muchas promesas, donde la FUM-TEP quiere hacer oír su voz y llevar propuestas para mejorar la educación pública”, destacó la secretaria general Elbia Pereira, en la apertura de las actividades.
Durante toda la tarde y buena parte de la noche, el plenario se centró en analizar los informes de las comisiones de Balance y Perspectiva, consideradas “de las más gruesas”: el grupo analizó la coyuntura internacional y nacional y las perspectivas en el marco de un nuevo gobierno en 2025. Este viernes continuará el análisis de otros informes sobre políticas educativas, balance de retrocesos y mecanismos para avanzar.
“El plan es concluir con un programa para incidir en la campaña electoral. Aquí está el movimiento sindical, la FUM debatiendo hacia el futuro. Con esto interpelaremos a los candidatos cuando pasen las internas, de aquí saldrán las propuestas para el nuevo gobierno”, enfatizó Pereira, en declaraciones a la diaria.
Se espera que la discusión de ideas y la votación culminen, este viernes por la noche, con una declaración de la FUM-TEP. “Estas ideas serán parte del proceso de construcción colectiva de la escuela pública para todas y todos”, dijo la secretaria general.
Memoria y reconocimientos
Aparte de la sesión plenaria, hubo una mesa sobre coyuntura internacional con invitados de Brasil, Argentina y Costa Rica que se enmarcó en los principios estatutarios de la FUM-TEP, en cuanto al “desarrollo del espíritu de comprensión y solidaridad entre los pueblos de América Latina y el mundo, para coadyuvar al fortalecimiento de los vínculos, el respeto y la fraternidad entre los pueblos, la preservación del principio de autodeterminación de los pueblos, la vigencia irrestricta de los derechos humanos y la defensa de la paz mundial”.
Luego expusieron la decana de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República, Carmen Midaglia, y el analista Álvaro Padrón, quienes expusieron sobre los “desafíos de la FUM-TEP en cuanto a la importancia de la educación para los tiempos que vienen”.
La mañana también tuvo espacio para homenajes y emotivos reconocimientos, ya que el congreso de este año se enmarca en el 80º aniversario de la FUM. Así, subieron al escenario los exsecretarios generales Víctor Brindisi (en los años 60), Héctor Florit (desde 1990-2004) y Teresita Capurro (2005-2009), bajo una salva de aplausos.
También fue reconocido el trabajo de los integrantes del Secretariado Ejecutivo Nacional Verónica de León, Gustavo Macedo, Daysi Iglesias, Raquel Bruschera y Adriana Espantoso, Marta Acosta, Mara Velázquez, Alejandra Pereira, Elbia Pereira, Alicia Pintos y el actual presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, integrante del secretariado de la FUM-TEP desde 1991 hasta 2021.
Con la convicción de que ninguna idea ni avance sería posible sin las filiales que integran a la FUM y que le dieron “conciencia de clase” desde todas partes del país, también fueron reconocidas cada una de las 30 agrupaciones.