El Instituto Nacional de Colonización (INC) avanza en la regularización de un conjunto de viviendas en Gregorio Aznárez a través de la Intendencia de Maldonado (IDM), tras la reunión que mantuvo a fines de octubre el gerente general del INC, Martín Toledo, con el intendente Miguel Abella, la alcaldesa del Municipio de Solís Grande, Patricia Martínez, y los directores generales de los departamentos de Gestión Ambiental y de Vivienda, Jorge Piríz y Alejandro Lussich.

Según informó Toledo a la diaria, se trata de 50 viviendas del inmueble 647 ubicadas en un padrón rural de 4000 hectáreas -la mitad corresponden al complejo de viviendas-, incorporado por el INC cuando compró ese predio. Allí viven ex trabajadores del ingenio azucarero RAUSA y el INC debe regularizar las viviendas por exigencia del Banco de la República, que en su momento estuvo a cargo del remate.

El gerente explicó que se generará un padrón de 6 hectáreas y luego se realizarán los trámites correspondientes para crearlo y traspasarlo a la IDM. Considera que la medida es necesaria, dado que la vida urbana “conlleva situaciones que no son competencia del INC porque el objetivo del instituto es la producción agropecuaria del trabajo rural”.

La alcaldesa Martínez, por su parte, dijo a la diaria que es importante para que “las personas que habitan estas casas sean propietarias” y por el valor histórico de las viviendas, que son las primeras construidas en el pueblo.

Proyectos para Solís Grande

Durante la reunión, Martínez planteó diversos proyectos a ser analizados por el INC. Por un lado, planteó la necesidad de contar con un padrón para la construcción de una cooperativa de viviendas. Toledo dijo que el padrón de 6 hectáreas que planean generar puede “albergar a 30 familias” de este proyecto.

También la alcaldesa propuso la instalación de un centro de adicciones en la zona, que considera necesario para que “puedan tratarse quienes lo necesiten”, debido a que los más cercanos se encuentran en Piriápolis, Pan de Azúcar o Maldonado.

Por último, uno de los “más ambiciosos”, es un proyecto turístico sobre el arroyo Solís Grande, con la construcción de obras a definir. Adelantó que puede ser un muelle, “respetando el cuidado del medio ambiente y de los humedales”. Para eso, indicó que se necesita la autorización del INC y del Ministerio de Ambiente (MA).

Toledo dijo que, “desde el punto de vista productivo, tiene muchas limitaciones porque suele subir el agua salada”. “La aptitud pastoral de los predios es super limitada, porque el agua salada afecta mucho a los pastizales y no hay pastizales que sean comestibles para los rumiantes”, amplió.

Impulso de la producción lechera

En Gregorio Aznárez hay 12 unidades de producción lechera, dos de producción ganadera (una asociativa y otra individual) y cuatro granjeras, informó Toledo. Indicó que Maldonado “es uno de los departamentos donde hay menos áreas afectadas a la Ley 11.029 [de colonización de tierras]”.

Dijo que esto puede deberse a que “los fraccionamientos son más pequeños” a lo que establece el artículo 35 de la ley o a que “no hay organizaciones de productores que demanden tierra en esa zona”.

Agregó que el objetivo del INC es fomentar la producción lechera y consolidar las 12 unidades de producción en Gregorio Aznárez. Considera que este tipo de producción “tiene muchos beneficios para el desarrollo económico del país porque genera valor agregado y empleo, no solamente en la fase primaria, sino también en la industrial”.

Explicó que en un tambo de un productor familiar de 100 hectáreas trabaja la familia del tambero, al menos dos empleados, y quienes venden servicios de maquinaria y semillas, recogen la leche y la procesan. “Cada 2000 litros de leche, hay un puesto de trabajo permanente en la industria”, destacó.

Añadió que una vaca lechera brinda en promedio en el año “20 litros de leche por día”, y que los productores familiares “tienen 100 vacas en ordeñe, lo que equivale a 2000 litros de leche por día”. Además, aseguró que “cada dólar que se produce en un establecimiento lechero se multiplica por seis después”.

Por otra parte, señaló que hay una “fuerte apuesta” a que la lechería “sea un rubro atractivo para que los jóvenes se inserten”, así como “seguir fortaleciendo al sector criador que son los más afectados por el avance de la forestación porque compiten por las mismas áreas”.

Toledo dijo que además de los jóvenes rurales, la población objetivo es la producción familiar, los asalariados rurales y las mujeres rurales.