Desde 2023, la Intendencia de Maldonado (IDM) toma acciones para impedir el desarrollo del picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus) en las palmeras del departamento. En principio se hizo “un censo y una georreferenciación para evaluar cada palmera” y se colocaron trampas que luego demostraron la presencia del insecto.
Trascartón, mediante una licitación abreviada, la IDM contrató a la firma Loginok SA, que “en ese momento era la única empresa que trabajaba con ese tema y había hecho un mantenimiento con éxito en Zonamerica”, recordó el intendente Antía en la conferencia de prensa que ofreció sobre este asunto, en el edificio comunal.
Con ese mecanismo la comuna actuó sobre 1.000 palmeras y luego amplió la licitación hasta llegar a 1.200, de las cuales “sólo siete” volvieron a padecer al picudo rojo. Una nueva ampliación de la licitación permitirá llegar a 2.000 palmeras, se informó esta semana.
Hasta ahora, según datos oficiales, el gobierno ha destinado 625.000 dólares para afrontar el problema causado por el insecto, sin contar los costos “logísticos, técnicos y de análisis” que se cubren con el presupuesto departamental.
Antía reclama fondos de la OPP para “emergencia nacional”
Durante una reciente reunión convocada recientemente por el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) y liderada por el Ministerio de Ambiente, la IDM pidió que se decrete “la emergencia nacional” y que el Sinae lidere la planificación y ejecución de todas las tareas de coordinación.
En ese marco, Antía aspira a que la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) transfiera partidas a las intendencias para que encaren los tratamientos con efectividad y no de forma aislada. “Nosotros paramos otras obras que teníamos para gastar 625.000 dólares en esto, pero no todos pueden hacerlo”, remarcó.
El problema privado
A su juicio, también es necesario “encontrar un mecanismo legal que permita tratar a las palmeras ubicadas en predios privados”. En Maldonado se han relevado unas 30.000 palmeras, de las cuales 10.000 están en espacios públicos y 20.000 en predios privados.
Antía señaló que la comuna se comunicó con viveros y empresas de fumigación de la zona para que “aprendieran el mecanismo de control” para así brindar un servicio a los privados. También muchos privados se han contactado con la intendencia en busca de ayuda técnica.
“Nosotros, desde la IDM, estaríamos dispuestos a contribuir en algo, en la medida en que haya una transferencia también a nivel nacional”, dijo el jefe comunal. “Si no se trabaja junto con los privados, corremos el riesgo de que las 20.000 palmeras privadas sean un foco de contagio para los espacios públicos”.
Por último, Antía advirtió sobre la “falta de definiciones” a nivel nacional y de una “respuesta rápida” ante una situación que considera de “emergencia. “Si en Maldonado pasa lo que vimos en otros lugares, sería un desastre”, opinó, para subrayar que no observa entre los ministerios “una coordinación para tomar el toro por las guampas”.
Mientras espera una respuesta nacional a sus planteos, la IDM adoptó otra medida de prevención: “prohibir el movimiento de palmeras en Maldonado y el ingreso de esos ejemplares al departamento”.
Endoterapia preventiva
El ingeniero agrónomo Manuel Noguez, técnico del área de Gestión Ambiental de la IDM, explicó que, por el momento, se emplea contra el picudo rojo el sistema Sospalm, una técnica de endoterapia fija que es menos invasiva que otras.
Dado que la palmera “no tiene la misma capacidad que otro tipo de árbol para defenderse de esas heridas”, se instala una cánula en cada tronco a través de las que se aplican productos químicos que son inyectados en distintas frecuencias para tratamientos preventivos o curativos.
Cada cánula tiene una vida útil de entre 15 y 20 años, indicó.